París (Reuters).- Las cementeras Lafarge y Holcim propusieron hoy una serie de ventas de activos de toda Europa, incluyendo todas las actividades francesas de Holcim y las de Lafarge en Alemania y Rumania, en momentos en que buscan la aprobación de los reguladores para su fusión.
Ambas compañías tienen que deshacerse de unos US$ 6,810 millones en activos para ayudar a convencer a los reguladores de la competencia para que den el visto bueno al proyecto de fusión, que se dio a conocer en abril y crearía la mayor cementera del mundo con US$ 44,000 millones en ventas anuales.
Las compañías dijeron que buscarán compradores para operaciones en Austria, Hungría, Rumania, Serbia, Gran Bretaña, Canadá, Filipinas, Mauricio y Brasil, entre otros. Las desinversiones propuestas representan alrededor del 10% de las ventas globales de Holcim y Lafarge.
El presidente ejecutivo de Holcim, Bernard Fontana, dijo que las empresas ya han recibido cerca de 50 expresiones de interés de compradores potenciales y que pronto comenzarán las negociaciones.