(Bloomberg) De Beers seguirá limitando la oferta de diamantes para que la minera de piedras preciosas más grande del mundo pueda ayudar a la industria a recuperarse de la mayor caída en siete años.
“Estamos muy atentos para no sobrepasarnos. Preferiríamos mucho más una recuperación estable y sostenible que un despegue espectacular”, declaró el responsable de Estrategia de De Beers, Gareth Mostyn.
La división de Anglo American Plc y la empresa rusa Alrosa PJSC, que controlan casi las dos terceras partes del mercado, vendieron más de US$ 1,000 millones de diamantes en enero, superando las expectativas del mercado y suscitando la preocupación de que las ventas hayan sido excesivas y demasiado prontas.
El año pasado, las compañías mineras recortaron aproximadamente un cuarto de la oferta mundial para detener la caída de 18% de los precios de los diamantes en bruto generada por la desaceleración económica de China y una restricción del crédito en toda la industria
Los primeros datos sobre las ventas durante las fiestas de fin de año en los Estados Unidos, el mayor mercado de diamantes, habían sido positivos, y hubo demanda genuina de los clientes el mes pasado, dijo Mostyn.
“Estamos vendiendo lo que quieren y necesitan nuestros clientes en lugar de hacer algo que podría no ser beneficioso para nuestros intereses o los de la industria. Para nosotros, la clave es seguir aprovechando la mejora en la confianza a lo largo del 2016”, explicó.
Anglo ha hecho de De Beers la pieza central de sus planes para recuperar la compañía. La matriz con sede en Londres, que el martes informó un cuarto año de pérdidas, está acelerando los planes para dejar de operar en carbón y mineral de hierro y basar su futuro racionalizado en los diamantes, el cobre y el platino.
El aporte de De Beers a las ganancias de Anglo casi se redujo a la mitad el año pasado, en tanto las utilidades subyacentes cayeron a US$ 990 millones. Las ventas bajaron 34% a US$ 4,670 millones conforme cayeron los precios y la empresa redujo la producción y las ventas.
