Nueva York (Reuters).- El banco británico Barclays busca evitar una multa potencialmente histórica de 470 millones de dólares de reguladores estadounidenses de energía, bajo el argumento de que sus operadores fueron culpables de fanfarronear, no de manipular los precios de la electricidad en el estado de California.
Los cuatro operadores involucrados en una investigación, que se jactaron en correos electrónicos y mensajes instantáneos sobre lo “divertido” que era “cagarse” en ciertos precios del suministro de energía, en realidad no eran parte del complejo plan del que los acusa la Comisión Federal Reguladora de Energía (FERC, por su sigla local), dijo una fuente familiarizada con el punto de vista del banco.
La semana pasada, la principal reguladora de los mercados de electricidad del país exigió que Barclays demostrara por qué no debería pagar una multa de responsabilidad civil de 435 millones de dólares, más 34.9 millones de dólares para resarcir ingresos fraudulentos, por la manipulación de mercados de energía en California entre 2006 y 2008.
El importante banco británico, que aún se recupera de una multa casi equivalente por su desempeño en falsear el referencial de tasas de interés Libor, ya dijo que luchará “vigorosamente” contra las acusaciones de la FERC, en lo que marcaría una batalla legal histórica.
La entidad bancaria cree que las operaciones en electricidad en los días de los mensajes de los operadores muestran que el equipo de operadores de la Costa oeste no estaba manipulando lo precios en forma intencional para obtener ganancias, a pesar de los correos electrónicos “desafortunados” publicados en la presentación reguladora de 73 páginas de la FERC, dijo la fuente.
Toda pérdida sufrida en las enormes operaciones del banco -que durante algunos días representaron más de la mitad de todas las ventas en mercados específicos- era un esfuerzo por “generar credibilidad” con clientes potenciales en un mercado nuevo.
De hecho, en más de la mitad de los días involucrados, el banco en realidad obtuvo ganancias o perdió muy poco dinero, dijo la fuente, resultados que aparentemente contradicen la acusación de la FERC de que se involucró en lo que llamó “operaciones antieconómicas”, en las que pérdidas en un mercado brindarían ganancias más importantes en otro.
Para prevalecer en este juicio, que deriva de una investigación que comenzó en julio de 2007 tras una filtración anónima de otros participantes del mercado, la FERC tendrá que demostrar que los mensajes de los operadores muestran la “intención” de manipular mercados, un obstáculo difícil pero no imposible de sortear, dijeron expertos legales.
Una portavoz de la FERC, Mary O’Driscoll, evitó hacer comentarios, citando la política de la agencia de no hacer comentarios sobre litigios inconclusos.