El Centro Nacional de Planeamiento Estratégico (Ceplan) informó que en los próximos años los trabajadores más requeridos en mercados emergentes como el Perú, serán los que cuenten con habilidades digitales y capacidad de respuesta ágil y colaborativa.
Según el estudio “Subvenciones educativas: becas y créditos en Perú al 2020”, elaborado por el Ceplan, este segmento de trabajadores es donde probablemente se observe un mayor desajuste en la oferta de jóvenes profesionales más calificados, pero que serán absorbidos en mercados de baja intensidad productiva y tecnológica.
En ese sentido, el requerimiento de trabajadores en el sector privado formal peruano al 2020, con base en la dinámica del empleo observada entre 2008 y 2014, da cuenta de un incremento constante en actividades empresariales, de comercio y servicios.
Asimismo, el estudio analiza la evolución del sistema de subvenciones educativas bajo la modalidad de becas y crédito en el Perú y hacia dónde deberían orientarse las futuras subvenciones educativas, con el objetivo contribuir a expandir la tasa de participación de los jóvenes peruanos en la educación superior y nivelar el desajuste de competencias entre la educación y la demanda laboral en el país.
De acuerdo con información del Programa Nacional de Becas y Créditos Educativos (Pronabec) durante el periodo 2012-2014, el 70.6% de las becas otorgadas fueron de inclusión social en el Perú. Asimismo, de este último grupo, el 97.2% correspondió al programa Beca 18.
Así también, en el documento del Ceplan se observa que, entre 2012 y 2014, se concedieron alrededor de 21,087 becas a través del programa Beca 18.
De esas becas, casi el 70% están orientadas a los campos de Ingeniería, Industria y Construcción.
Seguidamente, las becas se agrupan en el campo de las Ciencias Naturales con una participación de 12.6%, y, en tercer lugar, las Ciencias Sociales, Comerciales y Derecho, con 10.1%.
Al respecto, el Viceministro de Gestión Institucional del Ministerio de Educación, Juan Pablo Silva, resaltó mencionó que el estudio muestra las tareas pendientes para que el país alcance estándares internacionales en formación superior: en términos de inversión, de acceso a la formación y de adecuación al mercado laboral.
“Con la mirada prospectiva de este documento, se espera hacer sostenible no solo el desarrollo, sino también una política de democratización de la educación superior”, sostuvo Silva. De otro lado en el documento se informa que el 68% de empleadores peruanos muestran la mayor dificultad para cubrir sus vacantes laborales.
Esta cifra, al igual que el año pasado, no solo se ubica por encima del promedio en América (42%), sino también del promedio mundial (38%), y sitúa al Perú como el segundo país entre el total de evaluados, según la última Encuesta de Escasez de Talento del 2015 realizada por Manpower.
“Es por ello que se requiere de una mayor sintonía con la fuerza productiva del país, que incentive la búsqueda constante de mecanismos de ajuste de competencias entre las ocupaciones de mayor calificación con mejor retribución en el mercado de trabajo”, explicó la institución.