Milagros Sánchez Vargas
msanchez@diariogestion.com.pe
El silencio en una conversación dice mucho, ya que puede resultar beneficioso, pero también podría delatar nuestras debilidades como en un juego de póker, donde el jugador evita ser leído frente a su oponente ante una buena jugada, con el popular ‘poker face’.
Mucha gestualidad y comunicación visual se ponen en juego delante de una partida de cartas, que si lo trasladamos al ámbito laboral, tú serías el jugador a punto de sacar cuatro ases (jugada de póker), frente a una sala llena de gerentes y directivos.
En el famoso juego de cartas apostamos sobre una puja inicial, y esa podría constituir ‘el as bajo la manga’ que necesitabas para sobresalir en aquella reunión de directorio que esperabas desde hace unos meses en tu trabajo.
Horas de amanecidas e innumerables tazas de café no servirán, si no supiste manejar tus emociones y usaste el silencio como un arma combativa, aseguró Jenny Beingolea, coach docente del CIDE-PUCP.
“Tú ya sabes cuando tu jefe está molesto, pero no conoces los gestos cuando tú estás en esa posición. La mejor manera de estudiarlos es frente a un espejo. Debes entender tu silencio y aprender a utilizar todas las herramientas de comunicación”, agregó la coach.
Como en todo juego, el ganador es aquella persona que supo jugar bien sus cartas y se metió en el cuerpo de sus contrincantes, pero si vas a una reunión de trabajo sin conocimientos y sin previa preparación, y pensaste que usando el silencio esquivarías las preguntas incisivas, te equivocaste, porque solo denotará tu incapacidad y desconocimiento, aseguró Beingolea.
“En una entrevista laboral, muchas personas se quedan mudas porque no saben qué decir, pero el silencio tiene muchas interpretaciones y el entrevistador puede pensar más cosas negativas que positivas respecto al entrevistado”, acotó.
En el plano de la comunicación, el contrincante no es la persona con quien compartes información, sino tú mismo porque expones tus manos, tus ojos, es decir, todos tus sentidos, que si son mal llevados, perderás.
“El silencio debería generar una pausa de reflexión que capte la atención del público”, refirió Beingolea.
Algunos expertos dicen que en el póker no siempre se gana partidas con manos valiosas, sino con un juego profesional y limpio que anticipa los movimientos del contrincante. Por ello, el silencio es primordial en estas jugadas porque se intercalan con el arte visual.
Según la coach, el peruano por naturaleza no sabe manejar su silencio porque a nivel cultural buscamos la información rápida y accesible. “Es una capacidad neurolingüística que no todos saben transmitir; la corporalidad es esencial para certificar nuestra veracidad en las palabras”, agregó.
Beingolea resaltó que guardar silencio o renegar son opciones reales frente a algo que nos disgustó de nuestro jefe, pero ¿cuál es tu objetivo: salir bien parado de la reunión o salvar el proyecto? “No hay silencios iguales, cada uno lo interpreta diferente”, acotó. ¿Y tú cómo manejas tu silencio?