El reto más importante de las empresas en gestión humana, además de reducir el nivel de rotación, es trabajar en líneas de carreras para sus trabajadores, afirma Oscar La Torre, socio de Consultoría de PwC.
“Cuando la gente busca trabajo, busca que la marca del empleador sea una marca poderosa; que tenga un programa de beneficios y una política salarial adecuada con el mercado”, sostuvo.
Sin embargo, no siempre un buen sueldo garantizará la permanencia o mayor productividad del trabajador. Según La Torre, si no existe empatía con los jefes o no se les ofrece una línea de carrera a los trabajadores, éstos terminarán migrando a otras empresas.
“Si no se tiene un jefe con el que se comparte las mismas directrices, el personal se irá por más identificado que se sienta con la empresa”, resaltó.
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En los últimos años, el modelo de gestión humana ha ido cambiando y hoy por hoy son más empresas las que cuidan y forman el talento humano.
Bajo esa premisa, las empresas desarrollan distintos incentivos a fin de mantener motivados a sus trabajadores.
“Cuando se abren nuevas plazas lo que se espera es que las personas que están dentro de la organización ocupen esos puestos. Todos estos incentivos forman parte del desarrollo profesional en su conjunto”, refiere el socio de Consultoría de PwC.
