Usted tiene a varios directivos a su cargo y uno de ellos le comenta, muy preocupado, que, al parecer, un jefe que le reporta directamente a él, está saliendo con una de sus asistentes.
A los involucrados los suelen ver muy seguido almorzando o saliendo juntos de la oficina y en la fiesta de fin de año. Le pide consejo sobre qué hacer, pues él ya les ha tocado el tema y ellos han negado la imputación, aclarando que, además de tener una buena relación jefe-subordinado, son solo “buenos amigos”.
Usted recuerda que casi siempre que ha habido rumores sobre supuestas parejas, hechos posteriores los han confirmado, y no cree en las “coincidencias”.
¿Qué debería de hacer? ¿Hasta dónde llega la vida personal de cada trabajador? ¿Debería también definir políticas para cuando se den casos similares?
Aceptando la realidad
Según la encuesta Office Romance de CareerBuilder (2014), tomada entre más de 3,000 empleados en Estados Unidos, el 38% de los entrevistados admitió haber salido con un compañero de trabajo de su misma empresa.
De ese grupo, uno de cada tres terminó casándose con el compañero y en uno de cada cuatro casos se trató de relaciones con alguien de mayor nivel jerárquico, siendo esta persona, en muchos casos, el propio jefe.
¿Por qué se da “el flechazo”?
Como adultos, descartando las horas que empleamos en dormir y transportarnos, pasamos la mayor parte de nuestra vida consciente en el trabajo. Por lo tanto, si a un hombre y a una mujer les toca coordinar en la oficina una serie de aspectos y empiezan a atraerse mutuamente, les será fácil encontrar la manera de pasar más tiempo juntos, ya sea para coordinar temas que podrían tratarse por teléfono o e-mail, trabajando hasta más tarde o saliendo a la misma hora.
A más horas de exposición juntos, más probable será que empiecen una relación informal, la cual quizá termine en enamoramiento.
¿En qué tipo de empresas suelen darse más parejas?
Como la cultura de una empresa se va forjando a base de experiencias, hábitos, costumbres y valores compartidos por un mismo grupo humano, los trabajadores de una misma empresa, conforme va pasando el tiempo, tendrán en común muchas cosas.
Es por ello que en aquellas empresas con una cultura organizacional fuerte será más probable que aparezcan espontáneamente parejas. Es el caso de Southwest Airlines, empresa conocida por tener una cultura empresarial muy marcada de buen servicio al cliente, con un alto enfoque en el colaborador, que reporta tener 2,328 de sus empleados casados con alguien de la misma empresa, un 6% de la masa laboral.
(Autor: César Antúnez de Mayolo, Profesor de la Universidad del Pacífico)