Sandra Vargas Gutiérrez
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Han pasado 35 años desde la última vez que Perú jugó un Mundial. En este lapso de tiempo nació la generación de los millenials –caracterizados por la independencia, la inmediatez y un gran apego por la tecnología–, la cual nunca ha visto a la selección nacional dar el gran salto. Pero si hoy el equipo de Ricardo Gareca gana, la historia para ellos cambiaría con buenas repercusiones, de acuerdo a los especialistas.
Javier Benítez, coach y autor del libro “Sé feliz gratis”, recuerda que a los millennials les gusta estar permanentemente conectados, compartir sus vidas y están acostumbrados a recibir una recompensa instantánea. Por ello, este proceso de eliminatorias sería positivo para esta generación.
“El millennial es impaciente por naturaleza, por lo que el hecho de que Perú después de varios años consiga su objetivo, los hace ver que toco cuesta más de lo deseado y, que con perseverancia, se consiguen los objetivos”, indica.
La alegría colectiva, además, detonaría en esta generación la percepción de esperanza, de acuerdo a Alexis Boggio, profesor de la Universidad del Pacífico. “Será la primera evidencia de un futuro con esperanza, inclusivo y prometedor en el que aparecerán nuevos retos que superen lo deportivo y nacional. Clasificar será una inyección de optimismo”.
El docente también recalca que, emocionalmente, es una oportunidad histórica para que se produzca el ansiado “cruce de varias generaciones, que en muchos aspectos conviven alejadas”.
Consecuencias laborales
Ernesto Rubio, coach y gerente general de Ronald Career Services Group, sostiene que una posible clasificación peruana a Rusia 2018 también tendría consecuencias positivas en temas laborales en el sector millennial, conformado por nativos digitales y ‘multitasking’.
“Podría calar de tal forma en la actitud de dichos jóvenes, que repercutiría en un mejor clima laboral, en una suerte de sana competencia, espíritu ganador, entusiasta y competitivo sí y solo sí la organización que acoge a estas nuevas generaciones empatiza idóneamente con ese sentimiento futbolístico inherente a todo su entorno”.
Incluso, el especialista considera buena opción que las empresas promuevan concursos (no monetarios) entre sus colaboradores respecto al partido. “Los empleadores que estén alineados con los más legítimos intereses de los aficionados, tendrán como consecuencia una productividad significativamente mayor, así como una concreta optimización del clima laboral en sí misma”.
Cercanía a la selección
José Echevarría, manager de Page Interim Perú, recalca que con una clasificación al Mundial esta generación impondría un cambio entre la hinchada y sembraría pasión para alentar a la selección peruana constantemente.
“Pueden transformar la mentalidad del peruano no solo en el fútbol, sino en el día a día. Un peruano con la seguridad de que su país es la mejor opción en todo sentido y que vale la pena creer”, apunta.
Benitez, por su parte, agrega que cualquier entusiasmo obtenido por un logro ayuda a que las personas se sientan un poco más empoderadas y, con ello, se mejore la confianza en nosotros mismos.