Nueve cosas que nunca se dicen en una entrevista de trabajo

De acuerdo a un artículo publicado por la red social de profesionales LinkedIn, hay cosas que los empleadores quisieran decirle a los postulantes antes de que comience la entrevista. ¿Cuáles son?

En las mejores entrevistas de trabajo el postulante habla bastante y el entrevistador muy poco -después de todo, se trata de conocer más al candidato y no al entrevistador.

Sin embargo, según un artículo de Jeff Haden publicado por LinkedIn, hay algunas cosas que a los entrevistadores les encantaría decir a los postulantes mucho antes de que comience la entrevista:

1. “Quiero que seas una persona agradable con quien trabajar”.
Las habilidades y calificaciones son importantes, pero todos quieren trabajar con gente que nos cae bien y que a su vez les caigamos bien.

Por eso queremos que sonrías. Queremos que haya contacto visual, que te sientas cómodo y que seas entusiasta. La relación empleador-empleado es un vínculo que comienza con la entrevista (o incluso antes).

Un candidato que causa una gran primera impresión y genera una verdadera conexión se convierte instantáneamente en alguien que sobresale del resto. Quizás tenga excelentes calificaciones, pero si no creemos que vamos a disfrutar trabajar con usted, probablemente no vamos a contratarlo. La vida es demasiado corta para trabajar con personas que no nos gustan.

2. “Por favor, no empieces diciéndome cuánto quieres el trabajo”.
Nosotros si queremos que usted desee el trabajo, pero no antes de saber realmente de que se trata. Es posible que tenga que trabajar 60 horas a la semana, o viajar más de la mitad del tiempo, o reportarse con alguien con menos experiencia que usted. Así que mejor siéntese tranquilo y entérese de que se trata el puesto.

No importa cuánto haya investigado, no se puede saber a ciencia cierta si usted desea el trabajo hasta que tenga la mayor cantidad de información posible. (Una buena manera de saber si usted en verdad quiere el trabajo es haciendo las preguntas correctas).

3. “Realmente quiero que sobresalgas”.
Una triste realidad de las entrevistas es que luego de ellas muchas veces no recordamos, a menos que revisemos nuestras notas, mucho acerca de algunos de los candidatos. (¿Injusto? Sí ¿Realidad? Absolutamente).

Eso significa que mientras más gente entrevistamos para un trabajo, y cuanto más separadas estén esas entrevistas, hay más posibilidades de recordar a ciertos candidatos por impresiones en lugar de una larga lista de hechos.

Así que cuando nos reunamos para debatir y decidir sobre el mejor candidato, en un inicio nos podríamos referir a alguien como “el tipo de los zapatos morados”, o el “graduado que habla cuatro idiomas”.

En resumen, podemos recordarlo por “características” – ya sean favorables o poco halagadoras – así que use estos detalles a su favor. Si bien su característica podría ser su ropa, un interés, o un hecho inusual en su educación o carrera, una mucho mejor característica es el proyecto que realizó en la mitad del tiempo previsto o ese asombroso nivel de ventas que logró.

En vez de dejarnos elegir la forma en que lo recordaremos, asegúrese de que usted nos dé una o dos notables razones por las que nunca lo olvidaremos.

4. “Pero no quiero que sobresalgas por ser negativo”.
De nuevo, no hay forma de que recordaremos todo lo que dice. Pero no cabe duda que recordaremos fragmentos de cosas negativas: como los candidatos que se quejan de su actual empleador, sus compañeros de trabajo, o de sus clientes.

Por ejemplo, si usted odia ser controlado al mínimo detalle, en vez decir eso diga que está ansioso por ganar más responsabilidad y autoridad. Entendemos que haya razones por las que usted quiere un nuevo trabajo, pero queremos saber por qué realmente lo quiere en lugar de por qué usted solo quiere escapar de su antiguo empleo.

No olvide que una entrevista es como una primera cita. Sabemos que estamos viendo la mejor versión posible de “usted”.

Así que si ahora se queja y protesta… sabremos que usted será alguien “muy especial” con quien trabajar en unos meses cuando se acabe la “luna de miel”.

5. “Quiero que haga preguntas que son realmente importantes para usted.”
Necesitamos saber si deberíamos contratarlo, pero igual de importante es asegurarnos que el trabajo sea una gran oportunidad para usted.

Así que queremos que haga las preguntas correctas: ¿Qué esperamos que pueda lograr desde el principio? ¿Qué atributos hacen destacar a nuestros mejores trabajadores? ¿Qué puede hacer para alcanzar los resultados? ¿Cómo va a ser evaluado? En sí, todas las cosas que le importan a usted… y por ende a nosotros.

En pocas palabras, usted sabe lo que busca en un trabajo. Nosotros no lo sabemos. No hay otra manera de saber realmente si desea el trabajo a menos que haga buenas preguntas.

6. “Pero me gustaría que no haga preguntas que tienen poco que ver con el trabajo”.
Sabemos que usted quiere un equilibrio positivo entre el trabajo y su vida personal. Todo el mundo lo desea. Aún así, evite todas esas preguntas acerca de vacaciones, o si está bien tomar una media hora extra en el almuerzo todos los días si también permanece una media hora más en el trabajo, o si hemos considerado abrir una guardería dentro del trabajo porque eso sería excelente para usted.

Primero, averigüemos si usted es la persona adecuada para el trabajo, y si las tareas, responsabilidades, deberes, etc., son ideales para usted. Luego podemos hablar del resto.

7. “Me encantaría ver que usted cause un impacto positivo desde el primer día”.
Esperamos que usted haya investigado un poco sobre la empresa. Eso es un hecho.

Pero para impresionarnos de verdad, use esa investigación para explicar cómo va a comenzar a desempeñarse y contribuir con la empresa de inmediato – mientras más grande sea el impacto, mejor. Si usted trae una habilidad específica, explique cómo podemos aprovecharla de inmediato.

Póngase en nuestro lugar. Tenemos que empezar a pagarle su salario desde el primer día, así que nos encantaría ver una ganancia de esa inversión a partir del primer día. En resumen, estamos felices de ayudarlo a convertirse en una súper estrella… pero nos encantaría ver que usted ya es una estrella.

8. “Ahora quiero que me diga que quiere el trabajo – y por qué”.
Al final de la entrevista usted debe tener una buena idea de si desea o no el trabajo. Si necesita más información, dígalo para así poder encontrar la manera de conseguir lo que usted necesita para tomar una decisión.

Si usted no necesita más información, haga lo que los grandes vendedores hacen: pida el trabajo.

Nos va a encantar el hecho que lo pida. Queremos que quiera realmente el trabajo – pero también queremos saber por qué lo quiere. Así que díganos el motivo: le va muy bien en puestos sin supervisión, o le gusta trabajar con diferentes equipos, o le gusta viajar con frecuencia, o usted hace su mejor trabajo cuando…

Pida el trabajo y demuéstrenos, de manera objetiva, que es una gran opción para usted.

9. “Me gusta cuando hace un seguimiento de la entrevista, sobre todo cuando es genuino”.
A todo empleador le agrada un breve mensaje de seguimiento luego de la entrevista, por ejemplo, decir que le gustó reunirse con nosotros y que está dispuesto a responder a cualquier otra pregunta es un gesto amable. Sin embargo, ser “educado” no lo hará destacar del resto. Son los detalles de la entrevista los que harán la diferencia en un correo de seguimiento. Busque puntos en común con el entrevistador y menciónelos en su mensaje.

Recuerde, una entrevista de trabajo es quizás el comienzo de una larga relación – y hasta las relaciones más profesionales se basan en interacciones genuinas.

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