Se dice que la verdad siempre sale a la luz. Aunque las palabras suenen convincentes, el subconsciente no miente y será el peor enemigo para lograr consolidar su tan ansiada ficción.
Según Florence Arce Roos, especialista en kinésica (estudio de los gestos), la comunicación es mucho más que las palabras. Los gestos y el tono de voz pueden ayudarlo a descubrir si alguien le está mintiendo. Arce reveló a Gestión algunos tips para descubrir al mitómano.
1 Solicitando permisos
Arce cuenta la historia de una ejecutiva que se quitaba el maquillaje cada vez que quería pedirle permiso a su jefe con el objetivo de lucir enferma. Cuando conseguía el permiso, en lugar de irse a casa, salía con su novio. “A través del lenguaje corporal, el jefe pudo haberse dado cuenta de que no era honesta”. Por ejemplo, uno puede identificar las mentiras a través de los gestos y posiciones corporales .
“Una persona que te miente te quita la mirada y, en ocasiones, se aleja al decir una mentira”. En las conversaciones, normalmente, quitamos la mirada un 40%, y este se eleva al decir falsedades.
2 En una entrevista laboral
La hoja de vida puede decir mucho de las competencias de un postulante a su compañía, sin embargo todo puede ser más que palabras.
Cuando hable con algún postulante, mire la forma como se sienta y la posición de sus manos. ¿Se ubica con los brazos cruzados? Es símbolo de incomodidad. “En una entrevista, hay microexpresiones y a través de estas podemos darnos cuenta de si son producto del nerviosismo o de una mentira”.
Si está al otro lado de la balanza y usted es el entrevistado, tranquilo, sus nervios pueden jugarle una mala pasada y comunicar algo incorrecto. No debe esconder las manos ni debajo de la mesa ni en los bolsillos.
Tenga en cuenta que el escritorio es el espacio del entrevistador y solo debemos colocar los antebrazos y utilizarlos para algunos gestos emblemáticos.
3 En relaciones con los demás
El tono de voz es importante. Arce comenta que a veces en las relaciones con amigos o pareja, las personas saben que están siendo engañadas, no obstante, la verdad duele y a nadie le gusta quedar como una persona estafada.
En estos casos, hasta el tono de voz puede ayudarlo a comprobar cuándo alguien le miente. Identifique si la otra persona empieza a jugar nerviosamente con el cabello. Además, cuando se miente el volumen de la voz disminuye y se habla más rápido porque quiere tratar de que la mentira pase inadvertida.