A veces es obvio que necesitamos un descanso, pero en la mayoría de los casos nos damos cuenta demasiado tarde.
Cuando trabaja más de 10 horas al día y los domingos ya no son un día de descanso, la sensación de exceso de trabajo puede convertirse en la nueva normalidad. Incluso en algún momento puede toparse con un obstáculo infranqueable, y cuando eso ocurre, puede tomar días o quizás semanas recuperar el entusiasmo, creatividad y motivación perdida.
Afortunadamente, algunas de las técnicas que los atletas de resistencia usan para detectar la necesidad de una recuperación adicional pueden ser utilizadas para indicar cuándo necesita recargar sus energías en el trabajo.
Cuando se trata de deportistas de élite, el sobreentrenamiento crónico puede frustrar el propósito de estar en buena forma y dar lugar a una resistencia, potencia y velocidad disminuida; a veces cuanto más duro trabajen, más lento se ponen. Lo mismo sucede con el resto de nosotros cuando estamos sobrecargados de trabajo. Agregamos más horas para compensar… y parece que hubiéramos avanzado menos. Entonces, ¿cómo puede señalar la diferencia entre sentirse sobrecargado de trabajo y sobrecargarse realmente de trabajo hasta el punto de estar muy estresado?
Jeremías Bishop brinda algunas técnicas sencillas que cualquier persona puede utilizar para evitar darse contra la pared. Jeremías es un ciclista profesional de montaña para Sho-Air/Cannondale Racing. Él ha sido miembro de la selección nacional de Estados Unidos en doce oportunidades y básicamente es una estrella del ciclismo de montaña.
Aquí unos consejos para mantener sus mejores resultados profesionales y no sentirse sobreestresado:
1. Revise su frecuencia cardíaca en reposo. Todos los días, antes de levantarse de la cama, tómese el pulso. (Hay varias aplicaciones gratuitas y fáciles de usar. Algunas incluso registran los resultados.)
La mayoría del tiempo su ritmo cardíaco se quedará dentro de un rango de unos pocos latidos por minuto. Pero cuando se está sobrecargado de trabajo y estresado el sistema envía más oxígeno a su cuerpo y al cerebro mediante el aumento de la frecuencia cardíaca. (Lo mismo ocurre cuando los atletas sobreentrenados y sus cuerpos luchan por recuperarse.)
Si su ritmo cardíaco es alto por la mañana, haga lo que sea necesario para conseguir un poco de descanso extra o dormir esa noche.
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2. Controle sus emociones. ¿Tiene un mal día? ¿Se siente irritable o malhumorado? Si usted no puede encontrar una razón específica para esto, puede ser que el estrés crónico y la fatiga pueden haber desencadenado una respuesta fisiológica y haber enviado más cortisol y menos dopamina al cerebro. Estar dispuesto a estar en un mejor estado de ánimo no supera el impacto de la química, y en casos extremos la única cura es un descanso.
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3. Revise su peso. Perder o ganar más de un por ciento del peso corporal de un día para otro significa que algo va mal. Quizás ayer fue muy estresante y no se dio cuenta de que no comió y bebió suficiente agua… o tal vez no se dio cuenta de lo mucho que comió.
La falta de alimento e hidratación puede dañar las funciones mentales en un nivel superior (puede ser por eso que cuando estamos sobrecargados de trabajo y nos sentimos estresados instintivamente queremos realizar tareas rutinarias, menos complejas.) Y comer demasiada comida, bueno, todos sabemos el impacto de eso.
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4. Hidrátese. El color de la orina puede indicar una falta de hidratación (aunque a veces un color más oscuro puede indicar que ha creado una orina muy cargada después de comer muchas vitaminas que su cuerpo no puede absorber.)
Cuanto más claro sea el color, más hidratado está. La hidratación es algo muy bueno. Una hidratación adecuada ayuda a la absorción de nutrientes y ayuda a aumentar los niveles de energía. Si su orina es más oscura que de costumbre, la cura es simple: beba mucha agua.
La clave es hacer un seguimiento durante un período de tiempo para desarrollar una idea de lo que es normal para usted. Ponga especial atención a los fines de semana y las vacaciones, y si usted nota un cambio dramático positivo es una señal de que usted necesita cambiar su rutina laboral.
No diga que esto es algo de lo que solo los atletas de élite tienen que preocuparse. Todos queremos ser mejores de lo que ya somos, sin importar la profesión, y cada vez que nos estrellamos contra la carga de trabajo definitivamente estamos lejos de nuestro mejor yo. Y no diga que no tiene tiempo para tomar un breve descanso o conseguir dormir un poco más.