(Bloomberg).- Exalumnos de Trump University que reclamaron una parte del arreglo judicial de US$ 25 millones que Donald Trump aceptó poco después de que fue elegido presidente están a punto de recuperar 80 centavos por cada dólar que gastaron en los seminarios de bienes raíces de la institución educativa.
Ellos demandaron por fraude, alegando que habían sido engañados por falsas promesas de riqueza y éxito instantáneo. Después de años de insistir en que las acusaciones eran infundadas, Trump aceptó el acuerdo que la corte estudia para su aprobación hoy jueves.
Más de la mitad (alrededor de 3,700) de los más de 6,000 exalumnos presentaron reclamaciones para ser parte del arreglo conseguido con la demanda colectiva. Se trata de una alta tasa de participación para una demanda colectiva de consumidores.
Un análisis del 2013 del despacho de abogados Mayer Brown LLP mostró que en algunos casos, menos del 1% de los beneficiarios elegibles presentaron reclamaciones.
El caso se convirtió en un punto inflamatorio durante la campaña presidencial del 2016, cuando los críticos apuntaron a las acusaciones para plantear dudas sobre si se podía confiar en el candidato republicano.
Trump llamó la atención aún más cuando acusó al juez, nacido en East Chicago, Indiana, pero de ascendencia mexicana, de estar sesgado en su contra debido a su compromiso de construir un muro entre Estados Unidos y México.
Esa publicidad – el acuerdo fue alcanzado 10 días después de la elección – contribuyó a que aumentara el nivel de participación. También fue significativo cuánto dinero gastó la gente en las clases. La colegiatura varió de US$ 1,495 para un seminario de tres días a US$ 35,000 para un paquete exclusivo.