Son muchas las razones por las que tenemos un empleo, entre ellas la pasión por nuestra profesión, el deseo de lograr un cambio positivo para nuestra comunidad o la necesidad de ganar dinero para mantenernos.
Sí, es cierto… trabajamos por dinero. Es por eso que hablar sobre las expectativas salariales durante una entrevista de trabajo es un tema delicado pero muy importante. Queremos el trabajo, pero en definitiva, queremos que el salario sea justo.
El portal Mashable.com consultó a algunos expertos sobre sus estrategias para obtener el salario deseado. Aquí sus consejos:
1.- No hable de dinero muy pronto
¿Se debe hablar sobre el salario durante la primera entrevista? Esa es la pregunta que todos nos hacemos.
Según Randy Hood, ejecutivo de HireRight, firma que brinda soluciones de verificación de antecedentes de empleados, la respuesta es no. Los postulantes no deben traer a colación el tema del salario durante la primera entrevista, y si el entrevistador lo hace, Hood sugiere desviar la conversación hacia otros asuntos.
“Redireccione la entrevista hacia sus logros en lugar del dinero. No quedrá que la compañía se centre en sus necesidades antes de que se comprometa a necesitar sus servicios”, afirmó.
2.- La mejor manera de responder a la pregunta sobre el salario
Si bien no es una buena idea discutir este asunto durante la primera entrevista, tarde o temprano llegará el momento de hablar de expectativas salariales. Ambas partes quieren saber si están en el mismo rango o al menos cerca.
Según Hannah Morgan, quien trabaja para el blog de busqueda de empleo y desarrollo profesional CareerSherpa.net, un postulante no debe hablar de salario antes de saber exactamente de qué se trata el puesto.
“Si el trabajo requiere horas extra, viajes o habilidades muy específicas, estos factores generalmente presuponen un salario más alto. A menudo, estos detalles no se discuten al inicio de la entrevista”, opina.
“Mi consejo es decir: ‘Me gustaría saber más acerca de todos los requisitos del trabajo y el paquete de beneficios que ofrecen antes de hablar de mis pretensiones salariales’. Si la compañía insiste con este asunto, el postulante puede preguntar: ‘¿Cuál es su presupuesto para esta posición?’ Por lo general la empresa conoce la respuesta, lo que proporciona un cierto marco de referencia”.
3.- Conozca el presupuesto de la empresa
Muchas empresas tienen rangos de sueldo para cada puesto, y la mayoría están dispuestas a compartir esta información durante el proceso de selección.
Tom Sykes, director de gestión de productos en Peoplefluent (proveedor de software de gestión de talento), resalta la importancia de ser honesto cuando se trata de responder a preguntas sobre el salario.
“No querrá proponer un monto demasiado alto o quizás aceptar un nivel de responsabilidad para el cual no se siente listo”, opina Sykes. “También es bueno tener en cuenta el título específico del cargo”. Palabras como “senior” o “principal” pueden ser indicadores para tener una idea de la remuneración, y hay mucha información en Internet para investigar cuál sería una remuneración tentativa para cada puesto, dependiendo el país o la región.
4. Qué decir si le ofrecen un salario bajo
Los postulantes deben estar preparados para lidiar con una oferta inicial de salario ‘poco atractiva’. Esto no significa que la empresa quiere pagar menos de lo que usted merece, pero quizás es necesario recordarle el valor que usted puede aportar a la organización.
“Su estrategia de negociación no debe basarse en sus remuneraciones pasadas si estas no se ajustan al nuevo salario que le gustaría percibir”, opina Hood. “Su estrategia debe estar dirigida a explicar ante el empleador el valor que usted le da a su trabajo y sus habilidades. Relacione sus pretensiones salariales con su capacidad para cumplir e incluso superar las expectativas.”
5. Averigüe sobre las bonificaciones
Antes de tomar una decisión final sobre el trabajo, los postulantes deben considerar otros tipos de remuneración dentro de la negociación. Morgan recomienda tratar primero el tema del salario y luego negociar otros tipos de bonificaciones, uno por uno.
“El postulante quizás averiguó si la empresa suele ofrecer bonificaciones o utilidades y de cuánto estamos hablando”, dice Morgan. “Incluso si la compañía nunca ha ofrecido estos bonos, el postulante puede preguntar si piensan hacerlo en el futuro”. Los seguros de salud y los incentivos por desempeño laboral son otro punto a tomar en cuenta.
6. Beneficios que van más allá del sueldo
Tener un buen sueldo es importante, pero como dice el viejo refrán, “El dinero no lo es todo en la vida”. Sykes opina que hay diversos beneficios no monetarios que las empresas pueden ofrecer, un buen ejemplo son las oportunidades de capacitación y desarrollo profesional.
“Si bien estas oportunidades no representan ningún ingreso en el corto plazo, el potencial de desarrollo profesional puede llegar a ser más rentable si se considera el mediano o largo plazo”, agrega.
7. Cómo rechazar una oferta de empleo de forma cortés
Una vez que tenga un completo entendimiento del puesto, salario y potencial que le ofrece la empresa, puede tomar una decisión informada; y recuerde que no tiene que aceptar un empleo solo porque se lo ofrecen.
¿Pero cómo rechazar esta oferta de manera cortes? Morgan recomienda decir lo siguiente: “En base al puesto, las oportunidades profesionales y el salario, esta no es la mejor opción para mí en este momento, pero muchas gracias por la oferta y me encantaría dejar abierta la posibilidad de postular a un puesto más senior en un futuro próximo”.
En resumen, la paciencia es esencial a la hora de hablar del salario. Esperar el momento adecuado y centrarse en el valor de su trabajo puede ayudarlo a afrontar con éxito un proceso de negociación.