A la hora de armar un Curriculum Vitae, el candidato debe tomar en cuenta el sector al cual pretende ingresar para adaptar, en base a una investigación previa, el documento en función al perfil buscado.

Para los postulantes a una consultora, el formato a seguir deberá ser sobrio, conservador y elegante. Lo contrario se aplica para los aspirantes a una firma dedicada a la publicidad o diseño creativo. En este caso, el profesional puede incluir una fotografía con un aire más fresco, menos formal.

Cuestión de ‘forma’
Junto a la buena redacción, el formato es clave. Así, según lo explica el portal CNN Expansión, el CV no debe condensar demasiada información, solo debe contar con 1 ó 2 páginas donde incluya datos tan precisos como elementales.

Times New Roman, Georgia o Trajan Pro son tipografías elegantes y se utilizan en marcas de lujo; mientras que Arial, Comic Sans o Calibri proyectan una imagen más flexible o informal.

Cada párrafo deberá contener un máximo de 5 líneas. Lo ideal es que la fuente sea de 10 ó 12 puntos. Elaborar categorías y colocarlas en intertítulos y por jerarquía es vital para establecer un orden.

Valor añadido
Enfóquese en datos concretos pero claves. Aproveche la Hoja de Vida para destacar sus destrezas, competencias, habilidades, logros obtenidos, etc. Por ejemplo, en el apartado de “objetivos”, indique en un par de líneas lo que podrá aportar a la empresa y su propósito profesional.

Al describir sus “estudios académicos”, lo ideal es mencionar un intercambio académico nacional o en el extranjero. Evite incluir detalles sobre su educación primaria, secundaria o preparatoria.

En el apartado sobre “experiencia profesional”, no descarte mencionar sus prácticas profesionales o investigaciones en la universidad, si es estudiante o recién egresado. Pero si ya cuenta con varios años en el campo laboral resalte los resultados conseguidos.

Clichés como “confiable”, “dedicado”, “responsable” no funcionan. Los reclutadores no quieren leer cualidades obvias -pues todo candidato debería contar con estos atributos-.

La fórmula del éxito en los CV: reto + acción = resultado. Lo que equivale a “qué hice + cómo lo hice = resultados”. Por ello, es vital colocar los logros alcanzados a lo largo de su experiencia profesional.

No dude en incluir reconocimientos o actividades extracurriculares (cursos, diplomados, ponencias), competencias y habilidades (procure que sus conocimientos estén certificados, este respaldo es importante) y, sin duda, idiomas.