La exministra de Economía y Finanzas, Mercedez Aráoz, alertó que el discurso de las ONG ambientales forma parte de las políticas estatales dirigidas al sector minero.
Según su análisis, este escenario se instauró tras el conflicto que paralizó el proyecto Conga, el mismo que marcó un antes y un después en el desempeño de la minería en el país.
“Veníamos con un ritmo muy acelerado en inversiones mineras, pese a las demoras en las aprobaciones. Pero luego de Conga -dijo Aráoz-, se pusieron muchísimas restricciones al proceso de inversión. Y el tema de los condicionantes ambientales, si es cierto obedecen mucho a estas ONG internacionales que tienen un discurso ambientalistas, que puede estar disfrazando otros intereses, se ha vuelto parte del esquema real”.
Recordó los altos estándares ambientales que se impusieron a las refinerías de metales y que después, tras las críticas, tuvieron que ser pospuestos hasta que se alcance la tecnología necesaria para cumplirlos.
“Hay que ver qué cosa es realmente un discurso para salvar el tema ambiental y social, ante un discurso que puede ser básicamente ‘no queremos que se desarrollen estos pueblos’”, recomendó la exministra en el XI Simposium del Oro y de la Plata, organizada por la Sociedad de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE).
Y, finalmente, aludió a lo que podría estar detrás del discurso ambientalista: “Un país que no desarrolla es alimento para la protesta, para el cambio de modelo, al modelo más ‘chavista’, si queremos llamarlo de alguna manera”.