Nueva York (Reuters).- La turbulencia probablemente volverá a Wall Street cuando la Reserva Federal decida subir su tasa de interés, dijeron importantes economistas de Estados Unidos en un artículo que advirtió que el enorme programa de estímulo de la FED podría tener consecuencias perjudiciales.
El documento se centró en una ola de ventas registrada en los mercados financieros a mediados del 2013 después de que funcionarios de la FED revelaron que planeaban recortar su compra mensual de bonos.
Los autores encontraron que inversionistas de fondos mutuos participaron en gran medida en la ola de ventas a pesar de que sus apuestas en el mercado no se hicieron con una gran cantidad de dinero prestado.
El descubrimiento es importante porque los autoridades económicas a veces evalúan las probabilidades de un colapso financiero observando el tamaño de las apuestas apalancadas, las cuales pueden ser propensas a cambios rápidos. La investigación pone también de relieve un riesgo quizá subestimado para los planes de un recorte gradual del estímulo de la FED.
“Cuando se tome la decisión de endurecer la política monetaria, la inestabilidad observada en el verano de 2013 es probable que vuelva a aparecer”, escribió el economista jefe de JPMorgan, Michael Feroli, el profesor de la Universidad de Chicago, Anil Kashyap, y otros dos economistas muy respetados.
Varios funcionarios de la FED estuvieron presentes en la conferencia en la que se presentó el documento, y dos de ellos dijeron que el paper aumentaban las preocupaciones.
“Las ideas destacadas por el documento ya forman parte del monitoreo actual de riesgos financieros de la FED, dijo el presidente de la FED de Minneapolis, Narayana Kocherlakota.
Kocherlakota, quien tiene derecho a voto en el comité que fija las tasas de interés de la FED este año y es un defensor del estímulo monetario, dijo que la economía de EE.UU. sigue estando tan débil que la Reserva Federal aún tiene otros “ dos o tres años “ para reflexionar sobre riesgos para la estabilidad financiera.
En el documento, también elaborado por los catedráticos Hyun Song Shin, de la Universidad de Princeton y Kermit Schoenholtz de la Universidad de Nueva York, los economistas llegaron a la conclusión de que la actual política de estímulo “no es un almuerzo gratis”, y puede dar lugar a turbulencias cuando se decida ponerle fin.
“Tal vez los efectos sobre la macroeconómia estadounidense sea tan suaves como fue el impacto del 2013”, señalaron los economistas. “Sin embargo, no se garantiza que el retiro de estímulo de la FED pueda tener un resultado tan benigno”, advirtieron.