El Estado peruano no solo le debe más de S/ 2,000 millones a la seguridad social, sino que ha creado un sistema que le permite aportar menos dinero por cada uno de sus trabajadores, perjudicando de esta manera la situación financiera y hospitalaria del Seguro Social de Salud en el Perú.
La exministra de Salud Midori de Habich advirtió que mientras subsista ese sistema de subsidios en favor de las entidades públicas no se podrá acabar con la crisis de EsSalud.
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Puntualizó, como ejemplo, que el Estado aporta por cada trabajador CAS un 9% del sueldo, aunque ha fijado como tope salarial S/ 1,500, así el empleado gane una suma superior.
“Se puede tener un sueldo de S/ 15,000, pero las entidades públicas solo pagan el 9% sobre un tope salarial de S/ 1,500. El Estado paga menos para ahorrar, pero le genera al seguro un serio problema de financiamiento”, declaró De Habich en el programa Agenda Política de Canal N.
Mencionó que otros de los casos de subsidio en favor del Estado, pero que van en contra del sistema del seguro social, ocurren en los sectores Salud y Educación, que aportan un 9% sobre el 65% del total del sueldo de cada servidor, y en el agrario que paga tomando como base solo el 4% del ingreso del trabajador.
“Hay un esquema muy complejo de subsidios cruzados que tenemos que limpiar, y un gran desorden de multiplicidad de tasas que hay que ordenar”, enfatizó.
La exministra dijo que adicional a esta reorganización se debe poner en marcha una reforma para crear una entidad que administre exclusivamente los recursos financieros de Essalud, y otra para que administre los servicios de salud.
“Si creamos una institución ad hoc para que administre los S/ 10,000 millones que recauda Essalud, la aseguradora requerirá menos personal, pues será más eficiente y actuará más profesionalmente. Este es el gran cambio que tiene que haber en los próximos años”, subrayó.
EL DATO
Prevención. Midori de Habich opinó que Essalud debe imponer un cambio en el modelo de atención de los pacientes, pues mencionó que el 65% de ellos requieren atenciones que se pueden dar en policlínicos o en consultorios dirigidos por un médico general.