(Reuters).- La agencia de riesgo crediticio Standard and Poor’s recortó el viernes la calificación de deuda soberana a largo plazo de Grecia a B- desde B, advirtiendo que las restricciones de liquidez sobre los bancos locales limitarían el plazo que tiene el nuevo gobierno para cerrar un acuerdo con sus acreedores.
El primer ministro Alexis Tsipras fue elegido hace apenas dos semanas con la promesa de dejar atrás impopulares medidas de austeridad impuestas bajo el acuerdo de rescate de 240,000 millones de euros (US$ 270,000 millones) y renegociar la deuda del país.
Pese a una gira por las capitales europeas en búsqueda de apoyo para una condonación de la deuda, su Gobierno parece aislado en la zona euro.
Además, el Banco Central Europeo prohibió esta semana a los bancos griegos usar bonos gubernamentales como colateral para pedir prestado al banco central mientras no exista perspectiva de un acuerdo sobre el programa de rescate.
“Pese a que el recientemente electo gobierno griego ha estado en el poder por menos de dos semanas, creemos que sus limitadas reservas de efectivo y sus sugerencias de condonación de deuda (…) restringen su flexibilidad para negociar”, dijo S&P en un comunicado.
“Las restricciones de liquidez han limitado el marco de tiempo en el que el nuevo gobierno de Grecia puede llegar a un acuerdo con sus acreedores oficiales”.
La agencia dijo que las calificaciones de deuda a corto y largo plazo permanecieron en panorama negativo, lo que implica que pueden ser recortadas nuevamente, y advirtió que las negociaciones prolongadas pueden causar un empeoramiento de la situación económica en el país.
“Una extensión de las negociaciones con los acreedores oficiales puede llevar a… un retiro de depósitos y, en el peor escenario, la imposición de controles de capital y la pérdida de acceso a prestamistas de última instancia, lo que podría resultar en la exclusión de Grecia de la Unión Económica y Monetaria”.