La Sociedad Nacional de Pesquería (SNP) expresó su preocupación por la violación de la regulación pesquera y la depredación constatada en reciente informe del programa Cuarto Poder realizado en Tumbes y Piura, en el que se evidencia cómo embarcaciones de menor escala pescan ilegalmente dentro de las 5 millas marinas.

Al respecto, la SNP precisó que las embarcaciones industriales son monitoreadas permanentemente a través de un estricto control satelital que fiscalizan Produce y la Dirección General de Capitanías y Guardacostas de la Marina de Guerra, con el cual resulta imposible realizar faenas en zonas prohibidas sin ser detectados.

Cabe mencionar, además, que actualmente la pesca industrial de anchoveta se encuentra en veda, y que sus actividades las realiza con redes de cerco y no de arrastre.

La SNP viene proponiendo que se implemente el control satelital para toda embarcación con capacidad de bodega superior a 10 m3.

Hoy tienen ese control solo las que tienen permiso de pesca de anchoveta, lo cual debería ampliarse para toda embarcación de pesca, independientemente del permiso de pesca que tenga.

“Se debe controlar a todo el que circula por el mar, y no solo a quien tiene ‘brevete’”, resaltó Elena Conterno, presidenta de la Sociedad Nacional de Pesquería al respecto.

Adicionalmente, el gremio ha propuesto el establecimiento de mecanismos de fiscalización con participación de organizaciones de pescadores, que son los que mejor conocen quiénes usan prácticas sostenibles y quiénes no, así como el otorgamiento de permisos de pesca artesanal por zonas y no a nivel nacional, pues en la situación actual muchos pescadores no tienen los incentivos correctos para proteger las zonas de pesca, las cuales son permanentemente amenazadas por pescadores de otras áreas.

Finalmente, Conterno señaló que urge poner freno a la construcción ilegal de embarcaciones, pues sigue incrementando el esfuerzo pesquero poniendo en riesgo la sostenibilidad de las pesquerías de la pesca artesanal.

Al respecto, desde 2009, el Imarpe ha alertado con preocupación que el esfuerzo de la pesca artesanal sigue creciendo y pone en riesgo la sostenibilidad de los recursos, y, a pesar de que hoy está prohibida la construcción de nuevas embarcaciones, lamentablemente se siguen construyendo de manera impune para luego salir a pescar de manera ilegal.