La campaña electoral no ha generado el nivel de incertidumbre de años pasados y las expectativas de los consumidores parecen mejorar con el calor del verano, a tal punto que siete de cada 10 peruanos afirman que están gastando más este año que en el 2015.
La última encuesta Pulso Perú de Datum reveló que el porcentaje de personas que sostienen que este año están gastando más que en el 2015 aumentó de 65% en diciembre a 73% en febrero, aunque este incremento también se da en medio de mayores presiones inflacionarias.
La percepción de mayor nivel de gasto fue más acentuada entre los adultos de 55 a 70 años (pasó de 62% a 75%), en el segmento A/B (subió de 59% a 78%), y en Lima (avanzó de 72% a 79%).
El mayor nivel de gasto también va de la mano con la expectativa de más recursos este año. La encuesta muestra que ahora el 41% de peruanos considera que sus ingresos serán mayores este año, siete puntos más que el 34% de diciembre.
Los más entusiastas con un posible aumento de sus ingresos son los jóvenes de 25 a 34 años (suben 11 puntos a 46%), el segmento A/B (pasa de 48% a 51%) y en la selva (crece de 47% a 55%).
Como es de esperarse, esta expectativa también influyó en la economía familiar. Ahora el 43% de personas cree que la situación de su hogar estará mejor dentro de un año, frente al 37% que decía esto en diciembre. Los
más optimistas son los jóvenes de 18 a 24 años (suben 14 puntos a 50%), el segmento A/B (de 50% a 56%) y en la selva (de 52% a 63%).
En la última encuesta se percibe un moderamiento con el nivel de endeudamiento, tan es así que el porcentaje de personas que afirma que terminará igual o más endeudado este año bajó ligeramente de 68% a 64%.
Los adultos de 55 a 70 años son los que creen que terminarán más endeudados (suben de 36% a 37%), el segmento D (pasa de 30% a 36%), mientras que en el norte del país bajó 15 puntos a 30%.
Opinión
Elmer Cuba
Inflación afecta la percepción
Aún son señales muy tímidas de mejores expectativas. El tema del mayor gasto lo veo más por el lado de la inflación. No se va a gastar más en cantidad sino en precio.
Entonces, si las cosas suben se va a gastar más. Pero también puede estar vinculado a la campaña política, en la que los jóvenes tienen una idea de que las cosas pueden mejorar con un nuevo Gobierno.
Además influye el fin del Gobierno del presidente Ollanta Humala. Este Gobierno llega debilitado y con una economía desacelerada. Entonces la esperanza es que el próximo Gobierno mejore las cosas y eso se puede estar filtrando a las expectativas económicas.
Pero hay que ver si esto se sostiene en marzo. Si las expectativas no van de la mano con la realidad, se desinflarán, y para que vayan de la mano con la realidad la economía real tiene que mostrar un mejor desempeño y hasta ahora no está ocurriendo eso.
Los números van a mejorar pero por el lado de la minería, no por el nivel del
gasto. Lo que sí se ve es que el sobreendeudamiento se ha estancado, eso es bueno.