Usted afirma que el mayor riesgo que enfrenta nuestra economía es la revaluación del tipo de cambio. ¿Por qué?
Hace seis años la cuenta corriente de la balanza de pagos era superavitaria en casi 4% del PBI y el 2012 cerró en un déficit de 4% del PBI. Es decir, la brecha externa se ha deteriorado de manera sistemática. Detrás hay un fenómeno positivo: ha habido más inversión (sobre todo inversión directa extranjera) que ahorro interno en ese período, pero a ello se le suma un sobre financiamiento del déficit en cuenta corriente porque están entrando muchos capitales.
¿Qué tanto más?
El año pasado han ingresado en total US$ 22,000 millones, de los cuales nuestra economía ha absorbido US$ 6,000 millones y el BCR ha tenido que comprar la diferencia. Hay exceso de dólares que se traduce en una fuerte apreciación (caída) del tipo de cambio (soles por dólar).
¿Es temporal esa abundancia de capitales del exterior?
Estados Unidos ya ha anunciado tres paquetes de emisión cuantitativa de dinero y el último es tremendo porque van a fabricar dólares por US$ 85,000 millones cada mes hasta que el desempleo en ese país disminuya a 6.5%, lo que tomaría hasta el 2014. Entonces, hay que hacer algo.
¿Por qué, cómo nos impacta?
Porque esta apreciación vertiginosa del tipo de cambio (Ver recuadro) no se explica por una ganancia de productividad de las empresas del sector transable y está afectando la rentabilidad de este sector que abarca a las exportaciones, pero también a la producción nacional que se orienta al mercado interno y compite con bienes importados (por ejemplo, textiles, alimentos).
¿Cuántos serían los afectados del sector transable si no se toman medidas y continúa la apreciación del sol?
Son bastantes, el sector transable en el Perú puede tranquilamente representar el 40% del PBI. Aparte de la pesca y minería, está prácticamente toda la industria y también se ven afectados los campesinos, lo cual puede retrasar la disminución de la pobreza, ya que estos producen alimentos que tienen que competir con los alimentos importados ahora más baratos (trigo vs. papa).
¿Y cuándo se empezarían a percibir el efecto de la apreciación del tipo de cambio en esas empresas?
Estimamos que a este rimo de apreciación la balanza en cuenta corriente de la balanza de pagos podría llegará 6% del PBI en el 2014 (déficit similar a cuando sobrevino la crisis asiática), con un dólar de S/. 2.40, y asumiendo un superávit fiscal de 1.5% del PBI.
¿Y eso que implicaría para nuestra economía?
Primero, la economía nacional podría pasar a una fase de crecimiento menor por un tiempo, debido a que se empezarían a parar algunos proyectos de inversión en el sector transable. No digo se está incubando una crisis financiera en el país ya que el BCR puede perfectamente afrontar una salida masiva de capitales que ahora financian la brecha externa; tampoco que vaya haber una crisis de balanza de pagos, pero sí que hay un tipo de cambio bajo que va a hacer que disminuyan las inversiones en el sector transable, lo cual llevaría a un crecimiento económico menor en el mediano plazo (y a menos empleo); no afecta al crecimiento de este año.
¿A cuánto bajaría el crecimiento en ese escenario?
De 6% a 7% que es hoy, a 4% ó 5%, lo cual no queremos que ocurra por un factor macroeconómico externo (alta liquidez en EE.UU).
¿Qué medidas se deberían tomar para evitar ese impacto?
Aparte de continuar con las políticas monetaria y fiscal restrictivas, hay cuatro medidas adicionales: prepago de parte de la deuda pública externa, elevar los límites para las inversiones de los Fondos de Pensiones en el exterior; el BCR debería seguir comprando dólares, pero un poco más de lo que sobra. El problema es que el efecto de las dos primeras es por única vez.
¿Qué más se necesita?
La cuarta medida es controlar el ingreso de capitales y reducir la rentabilidad que obtienen éstos en el mercado local para disuadir su ingreso. Ello se logra mediante medidas impositivas, cuya especificidad dependerá del tipo de capital (especulativo, de largo plazo), pero en general se trata de medidas muy transitorias, objetivas y transparentes (incluso el Fondo Monetario Internacional está a favor de medidas con esas características).
Por ejemplo…
Por ejemplo, para quien emite bonos en el exterior para financiarse y obtiene un beneficio tributario, hay que hacer que ese modo de financiamiento tenga similares condiciones (o más caras) que el financiarse en el mercado local.
Otro ejemplo es aplicar un impuesto al ingreso de capitales de corto plazo. Por ejemplo, si un capital ingresa por menos de un año, aplicarle un impuesto del 10%. También habría que eliminar el sesgo que existe en algunos tipos de ganancias de capital entre residentes y no residentes.
¿Por qué el MEF no aplica esas medidas?
Yo creo que el MEF piensa que no hay un problema todavía y que con austeridad fiscal basta, pero no es así.
Pero este año posiblemente va a gastar más…
Hay que buscar la mezcla óptima de política. Si el gobierno quiere gastar más para cumplir sus objetivos de inclusión social, mejorar la infraestructura, aumentar los sueldos de maestros, FF.AA., etc., y lo hace en un contexto como el actual en el que están ingresando masivamente capitales del exterior, el PBI puede crecer 8% anual y ahí sí habría un problema porque el dólar se seguiría apreciando y se afectaría mucho la producción nacional del sector transable. Por eso, es positivo que se esté generando un superávit fiscal.
El comportamiento del tipo de cambio real
Macroconsult advierte que todos los meses el tipo de cambio real (TCR) cae, lo cual hace perder competitividad al sector transable de nuestro país. Entre 2008 y 2012, esta variable bajó 10%, si comparamos los promedios de cada año.
Sin embargo, si comparamos el nivel más alto de la serie (julio de 2007) con la situación actual, la caída supera 17%, según Macroconsult.
Son varios los factores que se asocian al comportamiento del tipo de cambio real: los términos del intercambio (relación entre los precios promedio de las exportaciones y los de las importaciones), si esta relación aumenta, el tipo de cambio tiende a caer; igual pasa con el ingreso de capitales, a mayores flujos baja el dólar, mientras que el superávit fiscal incrementa el tipo de cambio real.
CIFRAS Y DATOS
Proyección. La inversión directa extranjera en el 2012, según el BCR, fue US$ 11,084 millones y este año sería de US$ 8,171 millones y en el 2014 subiría a US$ 9,336 millones.
Flujo. Los capitales de corto plazo que en el 2011 fueron negativos en US$ 1,307 millones, subieron a US$ 2,615 millones en el 2012 y se mantedrán altos este año (US$ 1,505 millones).