“La agroexportación es el segundo generador de divisas del país, después de la minería, encima de la pesa y los textiles. Es la industria que todos los peruanos debemos estar orgullosos”, sostiene el presidente de la Asociación de Gremios Agroexportadores (AGAP), Ricardo Polis.
Indicó que este sector seguirá creciendo en nuevas áreas el próximo año, “este es un negocio de largo plazo y tiene un periodo de maduración de tres o cuatro años”, remarcó.
Indicó que hay inversiones que empezarán a dar sus frutos en los próximos dos años.
Ricardo Polis recordó que este año fue complicado por el fenómeno del niño que impactó los primeros meses, pero a pesar de ello considera que este año se crecerá. “Se ha dado una floración buena en los últimos meses y eso permite medir que será un año bastante bueno”, sentenció.
Así, estima que, para este año, las agroexportaciones cerrarán en alrededor de US$ 5,500 millones, incluyendo el café y cacao, lo que significa alrededor un crecimiento de 8% en sus ingresos.
Líderes globales
El repunte de los arándanos en setiembre y el dinamismo en las uvas y mangos en estos meses no es una casualidad. Ricardo Polis considera que los retos del sector ubican en una mejor perspectiva para los próximos años.
Tal como se muestra en el cuadro, la proyección es que se logre el mayor ranking mundial hacia el 2023, entre los cinco principales productores de agroexportación.
“Esto no es casualidad. Ya lo venimos trabajando desde hace muchos años. El espárrago nos abrió los ojos para permitir soñar que podríamos lograr muchas cosas más”, expresó.
Hoy el sector agroexportador tiene 161 mil hectáreas en el país, sin considerar el café ni cacao en las que se involucran más de 400 empresas.