El Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP, por su sigla en inglés) podría incluir regulaciones al rompimiento de contratos, reveló Ildefonso Guajardo, secretario de Economía de México.
Los negociadores del acuerdo analizan establecer esa regulación como parte del capítulo de inversiones, el cual comprendería también procesos que instaurarían tribunales especiales (paneles) para resolver diferencias entre inversionistas y Estados.
Los paneles se levantan para solucionar conflictos entre Estados; cuando un inversionista se siente afectado por expropiaciones o por trato no nacional o discriminatorio, o para tratar controversias comerciales internacionales entre privados.
“Estamos analizando si se incluiría también por violaciones por rompimiento de contratos”, dijo Guajardo.
La Representación Comercial de Estados Unidos (USTR, por sus siglas en inglés) informó que varias formas para resolver controversias entre inversionistas y estados son parte de más de 3,000 acuerdos en el mundo y en 50 de los cuales participa Estados Unidos.
Estados Unidos tiene vigentes acuerdos de resolución de controversias con Chile, Perú, Singapur y Vietnam firmados en el marco de sus tratados de libre comercio.
Otros cinco integrantes del TPP, Australia, Brunei, Japón, Malasia y Nueva Zelanda son parte de más de 100 acuerdos que contienen ese mismo mecanismo de solución de disputas, según la USTR.
Bajo ciertas circunstancias, el TPP permitiría a las empresas trasnacionales de los países involucrados en el acuerdo demandar legalmente al Gobierno de cualquier otra de las naciones que lo firmen, exigiéndole compensación de “ganancias futuras” que dejen de poder obtener debido a algún cambio regulatorio doméstico.
Tras revelar a finales de marzo un supuesto borrador del capítulo de inversiones, Julian Assange, editor de WikiLeaks, criticó en un comunicado que el TPP desarrolla un tribunal supranacional en el que las multinacionales pueden demandar a las naciones donde tienen presencia. Este sistema, opinó, es un reto a la soberanía parlamentaria y judicial de los países involucrados.
La USTR argumentó que hay una oportunidad para establecer acuerdos entre las partes sobre un enfoque de alto nivel para resolver disputas sobre inversiones internacionales. “Estamos analizando generar las excepciones que la propia ley nos demanda al haber hecho las leyes secundarias, donde muchas no permiten que ninguna controversia se lleve a paneles internacionales en algunos casos”, agregó Guajardo.
Stiglitz
Permitir que los inversionistas litiguen contra gobiernos a través de paneles de arbitraje privados supranacionales no ha favorecido el incremento de la inversión dentro de los tratados de libre comercio e inversiones; por el contrario, desafía la capacidad del Estado para emitir regulaciones, aseguró Joseph Stiglitz, premio Nobel de Economía 2007, durante su participación en el Foro Económico Mundial sobre América Latina, el viernes pasado.
“Hasta el momento no hay evidencia alguna de que estas provisiones legales hayan incrementado la inversión en los países que las han adoptado”, aseguró el economista, al ser cuestionado sobre su posición en torno al Acuerdo de Asociación Transpacífico.
En este acuerdo –en el que participan 12 economías, incluyendo Estados Unidos y México– se negocia el que los privados puedan controvertir en paneles supranacionales decisiones gubernamentales que consideren arbitrarias y perjudiquen sus inversiones.
¿Conviene al Perú?
Para la especialista Alejandra Alayza, establecer este tipo de arbitraje en el TPP es algo que se debe analizar, pues consolidaría derechos que no están suficientemente especificados y actualmente existe una discusión global sobre si este tipo de arbitraje es el mejor mecanismo para proteger y fomentar las inversiones.
Asimismo, este tipo de arbitraje, que hoy tenemos con Estados Unidos, se ampliaría a otros países, incrementando la posibilidad de que empresas que no mantienen altos estándares de actuación accionen contra los países si ven afectados sus derechos. En el caso de los 12 países que conforman el TPP, Australia es el único que no incluyó este tipo de arbitraje en los TLC que ha suscrito, y no piensa hacerlo.
La figura puede resultar tan controvertida que en Estados Unidos están evaluando la conveniencia de que se incluya en el tratado que firmaría con la Unión Europea.
Red Iberoamericana de Prensa Económica
El Economista de México