De acuerdo al último reporte de Scotiabank, durante el 2016, la producción local de azúcar bordearía un millón de TM, lo que representaría una caída cercana al 6% respecto al 2015. “Este comportamiento estaría sustentado en la menor disponibilidad local de su principal insumo: caña de azúcar”, advierte el banco.
Así, durante el primer cuatrimestre del año, la producción de azúcar alcanzó apenas 315,000 TM, menor en 4.8% respecto a igual período del 2015. No obstante, apuntó que las caídas registradas en marzo (-26.2%) y abril (-21.5%), se habrían mantenido hasta junio, mes en el cual se habrían reducido las dificultades laborales por la cual atravesaba una importante firma del sector ubicada en la zona norte del país.
“Ante ese panorama, prevemos una gradual recuperación en el segundo semestre del 2016 en la medida que se solucionen los conflictos laborales y a que existe una ligera estacionalidad en los últimos meses del año, época en la cual se registra volúmenes de producción por encima del promedio mensual”, explicó.
Sobre las importaciones de este producto, el banco proyecta que continúen con su tendencia ascendente para compensar la caída en la producción local. Así, explicó que el volumen importado de azúcar durante el primer trimestre del año llegó a 114,647 TM – azúcar refinada en mayor proporción – incrementándose en 187% respecto a similar periodo de 2015.
Respecto a la cotización internacional del azúcar blanca (contrato N°5), el reporte alegó que esta alcanzó los US$ 440 por TM en marzo del 2016, siguiendo la tendencia al alza registrada en los últimos meses (la cotización llegó a los US$ 410 por TM a fines del 2015).
“Este resultado estaría asociado al récord en el consumo mundial de azúcar durante la temporada 2016/2017 según proyecciones del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA por sus siglas en inglés). Es así que si bien se espera un incremento en la producción mundial de azúcar, la cual llegaría a 169.3 millones de TM durante la temporada 2016/2017, está no llegaría a compensar el consumo mundial, el cual se proyecta que llegaría a los 173.6 millones de TM durante la temporada 2016/2017”, explicó.
A esta situación, se sumaría la caída del nivel mundial de inventarios, el cual llegaría a 32.8 millones de TM, el más bajo desde la temporada 2010/2011, apuntó.
Respecto a la producción mundial, afirmó que está se incrementaría en 2.6% respecto a la temporada previa debido al impulso de Brasil – primer productor mundial – con 37 millones de TM (+6.9% respecto al periodo previo), ante mejores condiciones climáticas y menor porcentaje de caña de azúcar destinada a la producción de etanol.
A lo que se sumaría la mayor producción de los países de la Unión Europea –tercer productor mundial – con 16.5 millones de TM (+17.8% respecto al periodo previo), debido a una mayor área cosechada y mejores rendimientos.
“Sin embargo, este crecimiento se vería acotado por una menor producción en India – segundo productor mundial – con 7.9% menos respecto a la temporada previa – debido a menor área cosechada -, y una menor producción en China –quinto productor mundial – debido de una menor área sembrada ante la sustitución de caña de azúcar por otros cultivos como tabaco y bananas”, indicó el banco.
Sobre el precio local del azúcar, Scotiabank prevé una ligera tendencia al alza en los próximos meses.
Así, el precio local del azúcar rubia (la más consumida a nivel local) llegó a los S/ 2,63 por kilogramos en mayo del 2016, mayor a los S/ 2,52 por kilogramos con el que cerró el año 2015.
“Este resultado estuvo explicado por la caída de la oferta local de azúcar en el primer cuatrimestre del año. Cabe mencionar que, el precio local también estaría influenciado por factores externos, dado que la cotización internacional de azúcar rubia (contrato N°16) podría seguir una tendencia al alza. Así la cotización llegó a los US$ 594 en mayo del 2016, mayor al nivel registrado en diciembre del 2015 (US$571 por TM), según cifras del BCR”, advirtió la oficina de análisis.
Industria del azúcar
La industria azucarera en Perú está compuesta por 11 empresas que cuentan con ingenios para la producción de azúcar refinada y derivados, además de pequeñas empresas y campesinos particulares que se dedican a la siembra de caña de azúcar.
Así, durante el 2015, la oferta total de azúcar refinada ascendió a 1 millón 457,751 toneladas métricas, es decir, 5.6% más respecto al 2014, creciendo por segundo año consecutivo, refiere el último reporte de la oficina de Estudios Económicos de Scotiabank.
De este volumen, apuntó el reporte, el 75% (87% en el 2014) correspondió a producción local y el 25% (13% en el 2014) a importaciones. Mientras que el rendimiento de la caña de azúcar, principal insumo de la industria, se redujo, pasando de 126 TM/ha en el 2014 a 121 TM/ha en el 2015, el más bajo en los últimos ocho años.
Pese a ello, el Perú tiene uno de los rendimientos de caña de azúcar más altos a nivel mundial. Prueba de ello es que, según la organización de las Naciones Unidas para la alimentación y la agricultura (FAO por sus siglas en inglés), el país llegó a tener la más alta productividad a nivel mundial el 2014, llegado a los 126 TM/ha, y superando a países como Etiopía (119), Senegal (114), Egipto (113), Malawi (108), Guatemala (103), entre otros.
Al año siguiente, la producción local de azúcar refinada llegó a 1 millón 090,776 TM, cayendo 10.4% respecto al 2014, según el Minagri.
“Esta evolución estuvo explicada por la menor área cosechada ante huelgas que afectaron el sector”, refiere el reporte del banco. A nivel de empresas, la mayor productora de azúcar el año pasado fue Casagrande (25.1% del total), seguida de Cartavio (15.3%), Agroindustrial Laredo (14.5%), Paramonga (12.6%), San Jacinto (9.9%), Tumán (6.2%), Pomalca (6.0%), Pucalá (5.2%), Andahuasi (4.4%), Chucarapi (0.4%) y Azucarera del Norte (0.3%).
Respecto al consumo per cápita de azúcar en Perú con cifras al año 2014 (38.2 Kg) aún es bajo respecto a otros países en la región. Así, nuestro consumo es menor respecto a países como Brasil (59.1 Kg.) y Chile (43.2 Kg.) pero cercano a Uruguay (40.5 Kg.), Argentina (39.6 Kg.), y México (38.3 Kg.).