“Hay desánimo para invertir hasta no saber futuro de la regulación”, sentenció Rolando Piskulich, presidente de la Asociación de Industriales Lácteos (ADIL), al repasar el panorama para las inversiones y la estabilidad jurídica en el sector.
Se refirió así a los proyectos de ley en la Comisión Agraria del Congreso que pretenden restituir la prohibición uso de la leche en polvo y grasa anhidra en procesos de fabricación de productos lácteos como leche evaporada, quesos y yogurt.
“Dudamos que haya habido un análisis técnico profundo sobre cómo se sostiene la cadena de valor y a toda su fuerza laboral y productiva. Estamos frente a una medida que es inconstitucional y contraviene los acuerdos comerciales que el Peru tiene”, dijo el titular de ADIL.
“Estas propuestas tendrían un alto costo para el consumidor que pagaría más por un mismo producto, ya que tendría que asumir el costo adicional e innecesario de la importación.
“Además se perderían 1,000 puestos de trabajo, dedicados a la elaboración de productos lácteos, pues se cerrarán líneas de producción (30% de la producción actual) por no tener el insumo requerido”, añadió.
Por otro lado, aseguró que se perderán divisas y se recaudará un menor impuesto a la renta.
Puede caer el sector
Por otro lado, dijo que de llevarse adelante estas propuestas, el sector cerraría el 2017 con un crecimiento negativo de -1%, tras haber cerrado 2016 con 3.6% y 2015 con casi 5%.
“Por el crecimiento de 2016 no nos podemos quejar en relación a lo mal que ha terminado la industria en general, pero nos preocupa lo que pase este año en relación a la estabilidad jurídica”, comentó.