Edwin Bardales Saucedo
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En el transcurso del segundo trimestre del próximo año, la Agencia de Promoción de la Inversión Privada (ProInversión) adjudicará la buena pro de la concesión de la futura central termoeléctrica de Quillabamba, la cual funcionará en base a gas natural y demandará una inversión de US$ 200 millones aproximadamente.

Este nuevo proceso de concesión que realizará ProInversión busca elegir a un inversionista privado que se comprometa a diseñar, construir, operar, mantener y financiar una planta de generación termoeléctrica, cumpliendo determinados requisitos técnicos, financieros y legales que serán establecidos en las bases del concurso.

La futura central termoeléctrica, cuya área de influencia será la región Cusco, contará con una capacidad de 200 megavatios (Mw) de ciclo simple y que operará con gas natural.

Según información de ProInversión, la planta debería iniciar su operación comercial antes del 31 de marzo 2017.

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Con la finalidad de conectarse al Sistema Eléctrico Interconectado Nacional (SEIN), la planta deberá contar con una subestación eléctrica de 13.8 kV / 220 kV, una línea de transmisión de 220 kV de aproximadamente 35 kilómetros, y otras infraestructuras que sean necesarias para su operación.

El plazo del contrato de compromiso de inversión será de 20 años, a partir de la puesta en operación comercial de la central térmica.

Para ser considerado como postor precalificado, las empresas interesadas deberán cumplir con los requisitos técnicos, legales y financieros que se exigirán en las bases.

Los requisitos técnicos exigidos permitirán acreditar la experiencia del interesado en aspectos técnicos relacionados con el proyecto, y los requisitos financieros exigidos permitirán acreditar que el inversionista posee suficiente respaldo patrimonial y de activos para realizar dicho proyecto.