En la última sesión del año del pleno del Congreso, ayer no se debatió la ampliación de la exoneración del Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) al combustible de avión, el turbo jet A1, que utilizan las aeronaves de transporte de pasajeros.
El dictamen del proyecto de ley que plantea la prórroga había sido rechazado el 10 del presente mes por el pleno, pero en la última sesión se pidió una reconsideración, la que finalmente también fue rechazada.
Con ello, la exoneración del ISC al combustible de los aviones vencería el 31 de diciembre de este año. Según Carlos Gutiérrez, gerente general de Asociación de Empresas de Transporte Aéreo Internacional (Aetai), a raíz de ello, a partir de enero los precios de los pasajes aéreos a nivel nacional se incrementarían, aproximadamente, en un 25%.
Según estimaciones, el turbo jet sería gravado con S/. 1.93 por galón. En promedio, para un viaje dentro del país se requieren 1,300 galones, entonces por vuelo se daría un aumento en el costo de viaje en S/. 2,509.
Este monto, que sería asumido por los usuarios de las aerolíneas, implicaría un incremento promedio en el ticket de entre US$ 15 y US$ 18.
Aplicación del ISC
El turbo jet A1 es un combustible que no tiene sustituto. El fin del ISC, indicó Gutiérrez, es desincentivar el uso de combustibles contaminantes, reemplazándolos por otro más limpio. Sin embargo, esa alternativa no existe.
“Se puede gravar el petróleo porque tienes otras alternativas, pero en el caso de los aviones es complicado, no tienes cómo sustituir. Esta norma no tiene razón de ser”.
Advirtió que los logros alcanzados en los últimos años (mayor tráfico, volumen de pasajeros, competitividad), gracias a los precios promocionales de los pasajes, se verán afectados.