(Bloomberg).- No importa si le gustan hervidos, revueltos o sumergidos en una salsa holandesa para obstruir coronarias: cuando los huevos son tan baratos, es buen momento para empezar a poner manos a la obra.
Las existencias en Estados Unidos ha aumentado tanto en los últimos meses que los precios son los más bajos para esta época del año en al menos un decenio. Probablemente los consumidores tardarán cierto tiempo en terminar el excedente de inventario. Por esa razón el gobierno está pronosticando que en 2017 los costos de los huevos caerán más que cualquier otro grupo de alimentos.
La caída marca un cambio brusco en el negocio de los huevos. En 2015, un brote de gripe aviar obligó a los productores a destruir millones de aves y los precios se dispararon. Deseosos de aprovechar la recuperación, los productores ampliaron los gallineros que para finales del año pasado eran los más grandes de la historia. Pero la demanda no siguió el ritmo. Si bien algunas granjas redujeron los niveles en los últimos meses, las gallinas se han vuelto más productivas, manteniendo una oferta abundante en el mercado.
“El mercado estuvo temporalmente privado de huevos, y ahora está desbordado”, dijo Tom Elam, presidente de la firma consultora FarmEcon LLC, con sede en Carmel, Indiana. “Hay demasiados huevos en el mercado”.
Caída del precio
Los minoristas cobraban un promedio de US$ 1.414 por una docena de huevos en mayo, el nivel más bajo para el mes desde 2006, muestran datos de la Oficina de Estadísticas Laborales. Los precios se desplomaron un 52% desde un récord de US$ 2.966 alcanzado en setiembre de 2015. Los costos se aprestan a caer hasta 6% este año, pronostica el Departamento de Agricultura estadounidense (USDA). La caída tiene lugar pese a que la inflación global proyectada de los alimentos es de 2%.
El stock total de huevos en Estados Unidos crecerá 1.3% en 2017 hasta 8,829 millones de docenas, dijo el gobierno en un informe del 9 de junio. Es el nivel más alto en datos que se remontan a 1992. Se prevé que la producción volverá a aumentar el próximo año, en tanto se pronostica que el stock total alcanzará 8,957 millones de docenas, según estimaciones del USDA . La mayor parte del suministro es de producción nacional.
El exceso ha sido un obstáculo para Cal-Maine Foods Inc., la productora de huevos más grande del país. Las acciones se desplomaron un 12% en 2017, el peor comienzo de año desde 2009. El 16 de junio, Adam Samuelson, analista de Goldman Sachs Group Inc ., rebajó la recomendación para la acción de neutra a vender.
“Históricamente, la industria del huevo ha experimentado muchos ciclos de expansión y contracción con períodos de sobreproducción que alteran el equilibrio entre la oferta y la demanda”, dijo el máximo responsable de Cal-Maine, Adolphus Baker, durante una presentación a principios de este mes.
Es posible que la actual caída no dure, sugirió Baker. “Los altos precios curan los altos precios” estimulando una mayor oferta, “pero los bajos precios también curan los bajos precios” al obligar a los productores a reducir su oferta, dijo.
En respuesta al derrumbe del mercado, la producción se redujo en Midwest Poultry Services LP, una compañía familiar de Indiana con 10 millones de gallinas ponedoras en cinco granjas que producen aproximadamente 160 millones de docenas de huevos al año.
“Este año, los primeros seis meses fueron desastrosos”, dijo el máximo responsable, Bob Krouse, que lleva 34 años en la industria del huevo. Se negó a decir cuánto redujo la producción. “Es sólo un buen recordatorio para todos de que se trata de un negocio cíclico”.