Drago Kisic

Perú ya está en búsqueda de una identidad colectiva. La cultura dominadora ya la ha incorporado en una buena medida. Tenemos datos sobre esto, en el año 1940. En ese censo, más del 50% de los pobladores del Perú fueron clasificados como indios, en el año 2015 según la Enaho, más de 60% somos mestizos y el 26% son indígenas, 5.6% blancos, 2.3% afroperuanos y el resto 5.4%, otros.

Aquí comienza a haber un elemento de homogeneidad, es un elemento positivo que nos ayuda a tratar de proyectarnos hacia el futuro.

El Perú tiene muy poco capital social. En el famoso “Trust” de Fukuyama esto existe cuando los miembros de una sociedad cooperan entre sí. Eso en el Perú no existe.

Tenemos además el tema de la anomia. Manuel Moreyra, en su presentación en la CADE de 1996, definió esto como el porcentaje superior de los individuos de un país que sigue una conducta antiética en un entorno social que no lo satisface. Esto produce aislamiento, crimen organizado.

Hay muy baja confianza interpersonal y los rankings internacionales que se han hecho sobre este tema ponen siempre al Perú en un lugar muy bajo.