El ministro de Transportes y Comunicaciones, Carlos Paredes, informó hoy que en julio comenzarían las obras civiles de la Línea 2 del Metro de Lima, que unirá el distrito de Ate Vitarte con el Callao, que incluye un ramal entre la avenida Faucett y la avenida Néstor Gambetta.
“Para las obras de la Línea 2 se tiene previsto realizar algunas expropiaciones aunque en menor medida y se ubican a los largo de los 35 kilómetros que tendrá esta línea”, declaró.
Indicó que en las próximas semanas se conocerá a la empresa consultora que realizará los estudios para la concesión de la Líneas 3 y la Línea 4 del Metro de Lima, los cuales podrían estar culminados a fines del presente año.
“Esperamos que antes de terminar la gestión de este gobierno entreguemos la buena pro de una de las dos líneas, ya sea de la Línea 3 o la Línea 4”, dijo a Gestión.pe.
Agregó que el estudio permitirá definir si el tipo de las obras a realizarse en ambas líneas seguirán el esquema de la Línea 1 (tramos aéreos) o de la Línea 2 (subterráneo).
Por otro lado, mencionó que en lo que resta del primer semestre se espera adjudicar la buena pro para la concesión de la Hidrovía Amazónica, que son 2,500 kilómetros de ríos en la selva y a los que se les quiere dar una mejor transitabilidad durante los 12 meses de cada año.
“Eso es muy importante para conectar las localidades que hay en la selva”, anotó.
Para el segundo semestre del año, Paredes reveló que se espera adjudicar dos tramos de la Longitudinal de la Sierra, aunque es muy seguro que uno de ellos se otorgará a finales de año.
“Así como estamos promoviendo inversiones en la red del Metro de Lima, que beneficiará a más diez millones de peruanos, también hay inversiones importantes en el interior como la carretera Longitudinal de la Sierra es un ejemplo, donde se están invirtiendo más de US$ 3,600 millones en darle transitabilidad con la pavimentación de aproximadamente 3,500 kilómetros”, indicó.
Manifestó que esas inversiones en pavimentación se desarrollan desde la frontera con Bolivia en el sur del Perú hasta la frontera de Bagua Grande, en el norte del Perú, con Ecuador.
Agregó que la Longitudinal de la Sierra permitirá mejorar la calidad de vida y la competitividad a millones de peruanos que viven en la zona andina.