Reuters.- El presupuesto de Chile para el 2018 tendrá un marcado sesgo de “prudencia”, dijo el martes el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, en medio de una menor recaudación fiscal y un persistente bajo dinamismo de la actividad económica local.
En un año marcado por las elecciones presidenciales, el titular de Hacienda enfatizó que los gastos hacia adelante serán administrados con mucho cuidado, en momentos de una mayor estrechez y una disminución en los ingresos del cobre, del que Chile es el mayor productor mundial.
“Las utilidades de las empresas no estuvieron mal, pero otros pagos de impuestos y la categoría ‘otros’ tuvo una disminución importante”, dijo Valdés a periodistas aludiendo al último balance tributario.
Bajo ese panorama, el funcionario admitió que el presupuesto del 2018 “anticipa cierta prudencia”, luego de que para este año se aprobó un alza del gasto público del 2,7 por ciento.
“(Esto) nos hace ver que tenemos que tener mucho cuidado hacia adelante con los gastos”, dijo Valdés.
El débil crecimiento de Chile, que aún no muestra señales de repunte, ha dificultado la puesta en marcha de una serie de promesas de gasto social y compromisos en materia de equilibrio fiscal. En medio de este escenario, el Gobierno se ha mostrado más activo en materia de emisión de deuda este año.
La semana pasada, Chile colocó bonos en los mercados internacionales por 2.300 millones de dólares y el miércoles ofrecerá deuda en moneda local por un equivalente a 2.038 millones de dólares.