La mujer que se convirtió en la persona más rica de Australia al desarrollar algunos de los grandes depósitos de mineral de hierro del país ha extraído una enseñanza clave de la última caída de las materias primas: contratar trabajadores más baratos.
La multimillonaria Gina Rinehart expande su personal para incrementar la producción de la mina de Roy Hill Holdings Pty en la remota Pilbara, en Australia Occidental.
Muchos de sus nuevos empleados cobran menos porque tienen poca o ninguna experiencia en minería, como Courtney Grove, de 24 años, que estudió ciencias y sanidad animal en la universidad.
Desde el mes pasado, Grove conduce un camión minero de color rosado que transporta 226 toneladas de mineral de hierro en la mina de US$ 10,000 millones.
Apuntar a los “verdes” a los que puedan enseñarse habilidades mineras básicas forma parte del intento de Roy Hill de mantener bajos los costos en una era de excedentes globales y de diversificar su fuerza de trabajo.
La industria del mineral de hierro se vio muy afectada como consecuencia de una declinación de tres años de los precios que redujo las ganancias y llevó a algunas compañías a seguir pagando a trabajadores no calificados hasta 200,000 dólares australianos (US$ 154,000) al año, el doble del salario promedio en Australia.
Si bien los precios se han recuperado en el transcurso de los últimos 12 meses, se estima que el aumento no perdurará.
“Tenemos que ser ágiles en lo relativo a los costos básicos”, dijo por teléfono Giles Lenz, gerente general de Recursos Humanos de Roy Hill desde la planta procesadora de la mina en Pilbara. “No tenemos políticas, prácticas laborales ni beneficios que incrementen nuestra base de costos”.
Luego de contratar a 858 personas en los últimos 12 meses, la compañía aún necesita incorporar otras 650, muchas de las cuales carecerán de experiencia.
Entre los reclutados hay ex trabajadores agrícolas, dueños de pequeñas empresas y hasta jugadores aficionados de baloncesto que tienen la coordinación necesaria para conducir un camión u operar maquinaria pesada.
El baloncesto es el deporte más popular del país entre las mujeres. Diez jugadoras se han incorporado a Roy Hill hasta ahora, resultado de la tarea de representantes de la compañía, que asisten a competencias en diversos lugares del estado de Australia Occidental. Reducir los costos básicos obedece a que la mina, al igual que sus rivales, ya no puede depender de precios altos.
En el 2011 el mineral de hierro –la materia prima utilizada en la producción de acero- superaba los US$ 190 por tonelada en China, el mayor consumidor.
Para el 2015 había caído por debajo de los US$ 40 en tanto la creciente producción y una desaceleración de la economía global derivaban en un excedente, según Metal Bulletin Ltd.
Si bien una mayor demanda contribuyó a impulsar una recuperación en los últimos 12 meses –a US$ 94.86 en febrero- compañías productoras como BHP Billiton Ltd. y Fortescue Metals Group Ltd. dicen que estiman que las reservas volverán a crecer y a generarse un nuevo excedente.
Los precios caerán a US$ 58 en el último trimestre del 2017, según la mediana de las estimaciones de 13 analistas que consultó Bloomberg, y llegarán a US$ 55 para el 2019.
Las sombrías perspectivas obligan a los dueños de minas a encontrar maneras de producir más con menos, incluyendo la adición de excavadoras, taladros y camiones automatizados, o detener las inversiones en proyectos que necesitan precios más altos para ser rentables.