Buenos Aires (Reuters).- Los mercados financieros de Argentina cayeron con fuerza hoy luego del fracaso en las negociaciones del Gobierno con los acreedores “holdout”, lo que abrió el segundo default en 12 años para el país.

La nación austral no pudo cumplir con un vencimiento de deuda tras la fecha límite del 30 de julio y cayó en cesación de pagos, aunque los precios de los seguros de la deuda sugerían que los inversores aún creen que se puede alcanzar un acuerdo.

“En un día de mucha expectativa por los últimos acontecimientos sobre la deuda argentina aún sin regularizar, los mercados financieros reaccionaron lógicamente con precios en bajas en títulos y acciones, suba de riesgo país, suba del dólar mayorista, suba de los precios de los futuros”, dijo un operador.

Un eventual acuerdo entre partes privadas por la deuda impaga debe mantener al Gobierno argentino fuera de las negociaciones por una cláusula vigente en los prospectos de emisión de los bonos reestructurados, que impide al país ofrecer mejores términos a acreedores que no entraron al canje, dijo el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich.

El funcionario negó el jueves que el país haya entrado en “default técnico” al cumplirse el plazo para afrontar el pago de deuda reestructurada.

“Siempre que llovió, paró; el que no necesita la plata, que no venda, hay que quedarse quieto, dejar pasar las turbulencias”, sostuvo un agente financiero en medio de una fuerte volatilidad de precios en los activos.

Otro agente afirmó que “estamos hablando de un default muy raro que en lo legal puede llevar años alguna resolución, entonces más de uno apuesta a que en las próximos días habrá alguna clase de acuerdo”.

Los bonos soberanos en el mercado extrabursátil cerraron con una importante baja del 4.8% en promedio, donde se destacó el “Par” en dólares con un derrumbe del 9.44%.

El riesgo país argentino medido por la banca JP Morgan subía 75 puntos básicos, a 634 unidades (2000 GMT), luego de marcar en la víspera su mejor nivel en tres años ante la esperanza de avances en las tratativas que se hacían en Nueva York y que terminaron por fracasar.

El índice bursátil Merval de Buenos Aires perdió un fuerte 8.38%, a 8.187,99 unidades, liderado por la merma del 10.76% anotada en los papeles de Pampa Energía.

Los instrumentos de la deuda doméstica ligados al PBI cayeron un 6.9% para los nominados en euros , perdieron el 8% en dólares y bajaron un 7.7% en pesos en el recinto bursátil.

El peso en el circuito marginal se depreció un 2.52% a 12,65/12,70 unidades por dólar en una plaza con escasos negocios, comentaron operadores.

La moneda doméstica en la plaza interbancaria bajó un 0.15 por ciento a 8,2125/8,215 por dólar, en una plaza regulada por el Banco Central.

Durante julio el peso interbancario cayó un 0.97% y en el mercado paralelo cayó un 4.33%.