La economía de México, que atraviesa una fase de bajo crecimiento, parece haber dado señales de mejoría en el segundo trimestre pero todavía muy gradual, dijo hoy el subgobernador del banco central, Manuel Sánchez.
El Producto Interno Bruto (PIB) de México se expandió un 0.3% entre enero y marzo, de acuerdo con cifras oficiales ajustadas por estacionalidad, apenas una leve mejora frente al 0.13% del periodo inmediato anterior.
Sánchez dijo a Reuters que la economía mexicana, la segunda mayor de América Latina, ha dado señales de recuperación “probablemente” un poco mejor de lo que se había anticipado.
“Parece que la economía va por una senda de mejoría muy, muy gradual, todavía muy preliminar”, dijo el banquero, uno de los cinco integrantes de la junta de Gobierno del Banco de México (central).
“Así como fue desalentador, un poco menos favorable el primer trimestre, pareciera que con lo que conocemos pudimos haber tenido un segundo trimestre ligeramente más favorable de lo previsto”, indicó.
Entre las señales positivas, Sánchez mencionó los índices de venta de las principales cadenas minoristas, agrupadas en la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales, así como las importaciones de bienes de capital de las empresas.
El débil comportamiento económico del primer trimestre llevó al Gobierno mexicano a recortar su pronóstico de crecimiento para todo 2014, a un 2.7 % desde el 3.9 % previo, debido a un dinamismo menor al esperado en Estados Unidos y al impacto de una reforma fiscal.
El propio banco central dijo en junio que también podría modificar, por segunda ocasión, el rango estimado de expansión, actualmente de entre 2.3 y 3.3%.
Sánchez no adelantó si la entidad monetaria ofrecería una nueva estimación cuando presente su informe trimestral de inflación, el 13 de agosto.
“Creo que el panorama es razonablemente positivo para el corto plazo e indudablemente debe de ser favorable a mediano plazo considerando el impulso que puede esperarse de las reformas estructurales”, dijo.
El 11 de julio, el banco central dejó en un 3 <5 ciento la tasa de interés de referencia, argumentando, entre otras cosas, que el gasto interno todavía no muestra señales de recuperación pese a una mejoría del sector exportador, ligado a Estados Unidos.
En materia de inflación, la entidad estima que el índice de precios se reduciría a niveles cercanos al 3 por ciento -su meta oficial- a partir de enero del 2015, desde el 3.75 por ciento interanual de junio.