¿Cuánto crecerá finalmente la economía peruana en el 2013? Para Juan José Marthans, profesor del PAD de la Universidad de Piura, este año está bien transcurrido y, tras el resultado de 4.37% en setiembre, afirmó que la tasa de expansión del PBI rondará el 5%.
Esto, dijo, no es algo que deba sorprender, sino que es algo natural en el difícil contexto internacional que vivimos. “Ese 5% es destacable frente a lo que viene ocurriendo con el producto mundial, especialmente de países desarrollados”, indicó.
Además, resaltó que lo más relevante es poner en contexto esta expansión, pues es casi duplica lo que crecerá Latinoamérica (entre 2.5 y 2.7%). Todas las economías de la región han sufrido desaceleraciones, a raíz de la contracción en la demanda internacional.
“Si se mantienen las condiciones hoy día vigentes en el marco de la crisis financiera internacional, la coyuntura en el frente político, social y económico del Perú, el próximo año podemos crecer sin ningún problema entre 5 y 6%”, sostuvo.
Sin embargo, el experto no descartó que se pueda gatillar nuevos efectos de la crisis internacional. Si se diera ese caso, entonces el Perú podría desacelerarse hasta un magro 0.5 o 1.5%, aunque descartó una contracción de la actividad.
Las variables clave a mantener en constante monitoreo -opinó- son: El rumbo de la política monetaria en Estados Unidos, el sobreendeudamiento de las regiones avanzadas (EE.UU., Europa y Japón) y las reacciones de China ante su reorientación de política económica.
La llave de la sostenibilidad
Para el economista, podemos mantener niveles de crecimiento superiores al 5% en los próximos años si es que se dan dos condiciones. La primera es que los precios de los commodities no sufran un deterioro mayor al que ya se ha visto y, la más importante y sobre la que tenemos injerencia, es mantener altos ratios de inversión privada.
En ese sentido, anotó que un componente clave es la inversión extranjera directa (IED), que hoy representa el 6% del total de inversión privada, la cual está en el orden de 28% del PBI. La IED -opinó- debe ser fomentada de una manera “absolutamente agresiva” para sostener el crecimiento.
El rol de la IED, explicó, mitiga el impacto de lo que ocurra internacionalmente porque “ahí esta la generación de empleo, ahí están los más altos niveles de productividad y todo esto acompañado con una reingeniería del Estado”, observó.
Finalmente, advirtió que la política monetaria en EE.UU. puede golpear al flujo que recibimos de IED, y ello genera un escenario altamente volátil. Por eso, recomendó ser muy activos para atraerla.
“El país de América Latina que más exitoso va a ser en los próximos 50 años, es el que permita la inserción de mayor inversión directa extranjera”, sentenció.