ENTREVISTA: Alfredo Torres, presidente ejecutivo de Ipsos Perú

La próxima camapaña presidencial se desarrollará en un escenario más que complejo para los futuros candidatos. A diferencia del 2006 y 2011, la contienda por ocupar el sillón de Pizarro se a en un entorno de franca desaceleración económica

Alfredo Torres, presidente de Ipsos Perú, sabe que este contexto de menor crecimiento impactará en las expectativas de los electores, y en entrevista con Gestión comenta los principales puntos en materia económica que estarán en la agenda del debate.

Estamos a portas de la campaña electoral ¿Qué características diferentes veremos en este proceso?
Una característica es que el país está en una situación de desaceleración, la economía no está creciendo y eso genera un cierto desánimo en la población.

*Otra diferencia con la campaña anterior es que el presidente (Ollanta Humala) está muy desprestigiado y hay una sensación de falta de liderazgo. No ocurría así con Alan García.

Pero sí con el ex presidente Alejandro Toledo…
Con Toledo sí, sin embargo existía un primer ministro muy fuerte que era PPK (Pedro Pablo Kuczynski) entonces la sensación de la ciudadanía es que había un piloto conduciendo la nave. Eso hoy día no ocurre y eso genera un desanimo que es diferente al que había en procesos anteriores.

¿Abre la puerta a un outsider?
A finales del gobierno de Toledo y el de García había un sector importante de la población que estaba a la búsqueda de un outsider porque si bien la económica crecía había una sensación de que no chorreaba lo suficiente, y eso abría el espacio para un candidato antisistema. Hoy día eso no se ve con la misma magnitud más bien la sensación es que ya se probó un outsider y no funcionó.

¿En qué sentido no funcionó?
Humala, por un lado, defraudó a los que esperaban que fuera un candidato radical pero por otro lado tampoco llenó las expectativas de los que esperaban que hubiera un líder reformista moderado.

En la campaña del 2006 y 2011 Humala pasa a la segunda vuelta con un sólido 30% de la población que exigía una cambio radical. ¿Veremos un porcentaje similar?
Siento que se ha debilitado porque hoy día ya no tiene un líder como fue Humala que de alguna manera encarna ese sentimiento. La izquierda está muy dividida y carente de liderazgos y por otro lado el entorno internacional ha demostrado que ese camino no va a ninguna parte ni por el modelo chavista o por el modelo de Lula.

¿Está perdiendo soporte?
Eso además se refleja en el propio escenario peruano cuando uno ve casos como las “lentejas” en Tía María, se ve también que la izquierda ofrece o huaracazos o pide lentejas, entonces eso desprestigia mucho también a esas opciones radicales. Pero todavía existe un tercio de la ciudadanía que no se siente identificada con ninguno de los tres candidatos tradicionales.

¿Y ese tercio de la población no abre un espacio a un candidato radical?
Ha bajado considerablemente esa demanda, más bien lo que sí hay es demanda por liderazgo en la lucha contra la delincuencia y contra la corrupción, son esas demandas básicas las que hoy en día mueven a ese sector de la población. En todo caso puede haber una mayor demanda por un líder mano dura que por un líder populista.

¿Un candidato con rasgos autoritarios?
Claro, lo cual es un mensaje para los actuales candidatos que creo que lo deben estar leyendo, supongo que van a incorporar en sus campañas estas demandas. El tema de la inseguridad ciudadana ha crecido mucho en importancia en la agenda nacional.

Durante la campaña del 2006, la economía ya estaba en la ola del crecimiento, en el 2011 empezaba el descenso pero aún estábamos en el pico, pero esta nos agarra en una situación de desaceleración ¿Cómo cambia eso el juego?

Las campaña va a tener que ir con oferta de proyectos tangibles, es decir la gente quiere obras a pesar de los escándalos de las constructoras brasileñas, la gente todavía siente que los más tangible de la gestión pública es cuando se hacen grandes proyectos.

¿Cemento?
Sí cemento y creo que los candidatos cuando recorran el país van a tener que hacer planteamientos muy concretos de los que es desarrollable en cada región en términos de grande proyectos y eso va a tropezar digamos con la sensibilidad que hay frente a los grande proyectos mineros y ahí van a tener que saber cómo venderlos.

¿Pero además de los grandes proyectos, no hay nuevos puntos en la agenda económica del país?
Otro tema que también se viene generando en el consenso ciudadano, sobre todo para empresas tanto grandes como para las más pequeñas, es que hay una demanda por desregulación.

Ha sido uno de los problemas más acusados estos años…
Se nos ha pasado la mano en materia de normas que limitan la gestión de las empresas de todo tamaño. Ahí hay una demanda, pero nuevamente el diablo esta en los detalles: qué cosa es lo que los candidatos van a poder decir y cómo puede ser usado eso en su contra.

Porque tiene que ser muy concreto…
Me refiero a que si se va a plantear desregulación en materia tributaria o laboral, eso puede caer bien a un pequeño empresario, sin embargo todavía hay muchísima gente a nivel de la opinión pública con ideas más tradicionales al respecto. Si bien la tendencia va hacia la desregulación van a tener que tener mucho cuidado en como plantear los temas para no generar mucha resistencia en sus sectores.

Por lo menos la flexibilización laboral va a estar en la agenda mediática ¿Cómo cree que se manejen los candidatos?
En el tema laboral es probable que no veamos de parte de los candidatos ningún pronunciamiento. Con la ley Pulpin vimos que rápidamente las convicciones se tuercen cuando ven una resistencia de un cierto sector de la población.

No habrá nada creativo por ese lado…
Creo que en el tema laboral no vamos a ver planteamiento muy diferentes a los que ya existen, pero sí puede ser que en otros aspectos normativos en el ámbito tributario, por ejemplo, haya propuestas más inteligentes.

¿En qué sentido?
Por ejemplo para incorporar a la pequeña empresa a la formalidad, probablemente cambiar regímenes tributarios sea una propuesta que veamos.

O reducir el IGV como proponía PPK en algún momento
Si, ahí pueden haber propuestas interesantes. Lo bueno de contar con candidatos con tanta experiencia como es el caso de PPK y Alan García, y la propia Keiko de manera indirecta, es que va a elevar el nivel del debate porque pueden hablar a partir de la experiencia de lo que funciona o no funciona, o hicieron y dejaron de hacer.

En las recientes campañas hemos visto que los que avanzan son los que llevan mensajes concretos…
De los tres primeros veo más a García y a PPK desarrollando mensajes concretos. A Keiko Fujimori tiene dos problemas que van a limitar su capacidad de propuesta, uno de ellos es que está en primer lugar y no le conviene arriesgar y el segundo es que hay una cierta disonancia entre sus electorado que le demanda un discurso más populista, y sus ideas, que aparentemente son más liberales.

El “gran tema” va a ser el manejo del agua del Estado
El presidente de Ipsos Perú, Alfredo Torres cree que en la agenda de la próxima campaña presidencial el manejo del servicio de agua potable en manos del Estado estará en la agenda de debate, dado que el actual sistema ha demostrado haber fracasado, sobre todo al interior del país.

“Ahí el gran tema es el agua y creo que PPK que es un convencido de la necesidad de trabajar para darle agua potable y salubridad a toda la población como una base para el desarrollo por un lado, y Garcia que también desarrolló un programa agua para todos van a entrarle al tema”, comentó.

Sin embargo, reconoce que abordar el tema será la tarea más compleja para los candidatos, debido a que la población sigue teniendo un rechazo muy profundo a la idea de la privatización.

Otro punto delicado en la agenda será el de la Unión Civil para las parejas del mismo sexo, que según Torres, será un tema que los candidatos preferirán abordarlo de manera prudente sin un apoyo activo.

“Los tres primeros están a favor de la unión civil lo que pasa es que calculan que políticamente no les conviene levantar el tema y dependerá de la prensa llevarlos a que se pronuncien”.

Indecisos. Alfredo Torres afirma que el perfil de ese tercio de la población aún indeciso es básicamente gente que no le interesa la política, de menor nivel educativo y también de menor nivel socioeconómico.

“Entonces es por eso tan difícil de predecir porque al no interesarles la política al preguntarles por quien te gustaría votar no te pueden decir un nombre; o les preguntas que opinas de tal pero no lo conocen, entonces por eso es que esa gente recién al final presta atención y toma una decisión”.

Factor Urresti.
Torres explicó que bajo un escenario en el que una de las principales preocupaciones de la población es la seguridad ciudadana, una posible candidatura de Daniel Urresti podría tener cierto alcance en la población, pero deberá luchar contra un juicio en su contra y la oposición de un ala del partido nacionalista.