Desde el primer número de Gestión, el 25 de setiembre de 1990, un tema que fue parte de sus páginas y fue el sector aerocomercial que en ese momento operaba la empresa AeroPerú, aunque por ese entonces ya atravesaba por serios problemas financieros.

Hasta 1991, el sector aerocomercial era operado por el Estado, quien además de fijar las tarifas, controlaba el acceso al mercado. Tal estructura fue transformada a fines del año 1991 dentro del marco de los procesos de liberalización y privatización de la economía, a partir del cual se desregula el mercado, permitiéndose que las empresas privadas establezcan libremente sus tarifas de acuerdo a criterios de mercado y admitiéndose la entrada de empresas extranjeras al sector.

“En los años 90 nosotros ingresamos al liberalismo económico, se dio el Decreto Legislativo N° 670, que modificó la Ley N° 24882, y entramos en América Latina a una etapa de privatizaciones y fusiones, así como la privatización de la infraestructura aeroportuaria y la explotación de los aeropuertos”, recuerda Julián Palacín, especialista en Aeronáutica Civil.

Por su parte, el director de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), Juan Carlos Pavic, indicó que en la década de los 90 no solo tenía la presencia de la estatal AeroPerú sino también de la empresa Faucett, las cuales concentraban casi todo el mercado aerocomercial peruano.

Desde ese entonces, el mercado aerocomercial peruano ha evolucionado de manera significativa a partir de la desregulación del sector a inicios de la década noventa.

La alta movilidad de empresas en el mercado, la concentración temporal en el mercado durante ciertos periodos, así como la fuerte competencia en precios y calidad, han sido algunas de las características más resaltantes del sector.

Un hito importante fue la concesión del Aeropuerto Internacional Jorge Chávez a la empresa Lima Airport Partners (LAP) desde el año 2001 y que solo en el 2014, recibió 15.7 millones de pasajeros, lo que representa un crecimiento de 5.1% respecto al año anterior.

Ahora LAP se prepara para el proyecto de ampliación del aeropuerto que demandará una inversión de aproximadamente US$ 950 millones.

Por otro lado, está la empresa Aeropuertos del Perú, que asumió en el año 2006, el reto de mejorar y operar una red de 11 terminales aéreos del norte peruano ubicados en Tumbes, Talara, Piura, Cajamarca, Chiclayo, Chachapoyas, Tarapoto, Trujillo, Huaraz, Iquitos y Pucallpa, además del terminal aéreo de Pisco. El tráfico de pasajeros por estos aeropuertos aumentó 10.2% en el 2014.

Mientras que los aeropuertos del sur del Perú son operados por la empresa Aeropuertos Andinos del Perú (AAP) y su director, José Balta, recuerda que cuando se hicieron cargo de la concesión en el año 2011 pues la infraestructura de los terminales ya tenían más de 30 años en promedio.

“Nosotros tomamos los aeropuertos del cluster del sur que son Arequipa, Tacna, Juliaca, Madre de Dios y Ayacucho; y todo estos aeropuertos tenían más de 30 años de haber sido construidos en promedio, y en todos los casos no habían tenido mantenimientos o remodelaciones que hubiesen mantenido estas infraestructuras con estándares adecuados”, dijo.

Al cierre del 2010, los aeropuertos del sur movilizaban 1.6 millones de pasajeros anuales pero desde el 1996 no pasaba de los 1.2 millones de pasajeros anuales.

“Pero a través de las inversiones realizadas hemos logrado cerrar en 2.4 millones de pasajeros en el 2014, y en algunos casos los crecimientos han sido de doble dígito o se ha duplicado la capacidad de recepción de pasajeros como ocurrió en Ayacucho”, declaró.

Por su parte, Pavic señaló que en la actualidad existen cinco aerolíneas ofreciendo el servicio regular y dos aerolíneas (Lan y Taca) que han puesto su hub en Lima.

“Desde la década de los 90, cuando hablábamos de un movimiento de 2.9 millones de pasajeros al año, a la fecha contamos con 16.7 millones de pasajeros”, precisó y al mismo tiempo se tienen registrados US$ 441 millones de invesión en los aeropuertos concesionados”, dijo Pavic.

Para Julián Palacín, el futuro del sector aerocomercial peruano debe apuntar a promover la presencia de aerolíneas low cost, teniendo en cuenta las 20 millones de personas que usan el servicio de transporte interprovincial pero que podrían usar el transporte aéreo en caso de tener un servicio a su alcance.

Otra de las novedades en proyectos aeroportuarios en el Perú será la construcción del futuro aeropuerto internacional de Chinchero de más de US$ 500 millones.

José Balta, quien también es gerente general de Sociedad Concesionaria Kuntur Wasi que tiene a su cargo este proyecto, manifestó que este aeropuerto demandará más de US$ 500 millones de inversión.