(Reuters).- La moderación en los precios a los consumidores y una deflación industrial persistente en China han reforzado las expectativas del mercado de que las autoridades podrían aliviar la política monetaria o adoptar otras medidas para detener la pérdida de impulso en la segunda economía más grande del mundo.
El índice de precios al consumidor de China (IPC) subió un 1.8% en abril respecto al mismo mes del año anterior, su menor incremento en 18 meses, mientras que el índice de precios al productor (IPP) bajó un 2% en su vigésimosexta caída consecutiva, dijo hoy la Oficina Nacional de Estadísticas.
“La presión inflacionaria relativamente baja proporcionará más espacio para que el banco central maniobre su política monetaria en los próximos trimestres para apoyar a la economía”, dijo Wang Jin, analista de Guotai Junan Securities en Shanghai.
El IPC se debilitó un 0.3% a partir de marzo, su segundo declive mensual consecutivo. Factores estacionales empujaron los precios a la baja, pero una racha de lecturas negativas podrían generar preocupaciones más amplias de deflación.
La subida del IPC anual y las caídas en el IPP y el IPC mensual fueron más débiles que los pronósticos promedios obtenidos en un sondeo de Reuters.
“En momentos en que el riesgo de deflación crece y las actividades reales se mantienen tibias, creemos que es hora de que el banco central considere una relajación de la política monetaria pronto”, dijeron economistas de ANZ en una nota.