Autoridades gubernamentales intervinieron cinco canteras de minería ilegal no metálica, ubicadas en la zona denominada Quebrada Cruz de Hueso del distrito limeño de San Bartolo, en lo que significó el primer operativo de este tipo.
La diligencia estuvo encabezada por el Alto Comisionado en Asuntos de Formalización de la Minería de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), Daniel Urresti, y por el fiscal superior Antonio Fernández Jerí, coordinador nacional de la fiscalías especializadas en Medio Ambiente.
Asimismo, contó con la presencia de 18 fiscales y con el apoyo de efectivos de la Policía Nacional. También participaron funcionarios de los ministerios de Energía y Minas, y Ambiente.
En el operativo se destruyeron siete cargadores frontales, cinco retroexcavadores, 13 volquetes, dos tolvas metálicas y cinco motores, los que tenían un valor aproximado de US$ 7 millones. Durante el operativo, que contó con el apoyo de la Policía Nacional, se produjeron 17 detenciones.
Urresti explicó que tanto la minería metálica como la no metálica tienen el mismo procedimiento para su explotación, es decir debe haber un denuncio y una concesión, contar con los permisos correspondientes y cumplir la normativa de medio ambiente.
“El boom de la construcción ha hecho que algunas personas busquen agregados para la construcción como arena fina, gruesa y hormigón y empiezan a explotar con sus máquinas, sin haber cumplido los requisitos de ley”, precisó.
Además, indicó que en la zona intervenida se viene realizando explotación de materiales desde hace mucho tiempo, sin los respectivos estudios de impacto ambiental.
“Esto ocurre a las puertas de Lima pero se está replicando en diferentes partes del país. Ubican un sitio donde sacar material y simplemente llevan la maquinaria y empiezan a explotar”, subrayó.
Informó que esta actividad ilegal también se realiza en zonas cercanas a las ciudades de Nazca, Ica y Chiclayo.