Davos, Suiza (Reuters).- El riesgo de un giro a la derecha en las elecciones al Parlamento Europeo en mayo preocupa a los principales ejecutivos del mundo, que temen que los comicios hagan al bloque más difícil de gobernar justo cuando quieren que emprenda reformas.
Un alto desempleo, el cansancio por las medidas de austeridad y un todavía famélico crecimiento ofrecen un escenario perfecto para que los partidos alternativos ganen adeptos en las elecciones.
Algunos críticos pronostican que un grupo de partidos antieuropeos, como el Frente Nacional de Francia o el británico UKIP, el griego Syriza o el holandés Partido de la Libertad podrían llegar a alcanzar un 20% o más de los escaños.
Eso podría presionar a los principales partidos de la Unión Europea a variar su rumbo y desafiar la capacidad europea para realizar una mayor integración, dados los nuevos poderes que tendrá la cámara sobre la mayoría de las leyes de la UE.
Para los presidentes ejecutivos que se reúnen cada año con la elite mundial Davos, las elecciones de mayo suponen un gran riesgo para las perspectivas económicas de Europa, incluso después de haberse evitado una ruptura de la zona euro.
“El riesgo real ha desaparecido. Pero hay un riesgo de que reaparezca este año”, dijo Axel Weber, presidente de UBS y ex presidente del Bundesbank, en una sesión en el foro titulada “¿Ha vuelto Europa?”.
Weber mencionó como un riesgo el posible auge de los euroescépticos en las elecciones, el cual según dijo podría complicar el proceso político en la UE. “Piensa lo difícil que ha hecho el Tea Party la gobernanza en Estados Unidos”, dijo.
Las últimas encuestas muestran que el Frente Nacional francés, contrario a la inmigración, ha ganado apoyos desde las elecciones presidenciales de 2012, en la que su líder Marine Le Pen fue tercera con el 17,9 por ciento de los votos, sus mejores resultados en la primera vuelta.
El francés Pierre Nanterme, presidente ejecutivo de la consultora Accenture, dijo que estaba preocupado por el alto desempleo que alimenta un “aumento de los extremos”.
“Estoy muy preocupado por el resultado de las elecciones europeas. Necesitamos ser muy cuidadosos porque si no creamos un entorno más integrador, la gente se va a preguntar cuál es el propósito de Europa”, dijo.
El desempleo de la zona euro seguía en un máximo récord en noviembre, el último mes del que hay datos oficiales disponibles, con un 12,1 por ciento de la población activa sin trabajp por octavo mes consecutivo.
En Grecia la tasa es del 28% y en España alcanza el 26%.