El Plan Nacional de Diversificación Productiva ya cumplió un año, y su progenitor y principal defensor, el ministro Piero Ghezzi, resalta los logros y lo que se viene en las próximas semanas, en el marco de una iniciativa que ya está ad portas de activar dos nuevos motores de crecimiento al país.

Además de las mesas forestal y acuícola, que ya están en la recta final, se creó la de industrias creativas. ¿Cómo va eso?
Ahí tenemos problemas básicamente normativos. Esta mesa tiene una serie de submesas: cine, industria editorial, artes, escénicas, etc. Además hay un subcomponente de las TIC; que hay que repotenciar porque el ecosistema de start-ups tecnológicos no es lo suficientemente sólido para maximizar la posibilidad de sobrevivencia de las empresas tecnológicas.

¿Cuál es la gran ventaja del sector?
Yo creo que es que hay muchas cosas normativas que pueden mejorarse de forma fácil, comparadas con los problemas que tiene forestal, acuícola, que pueden ayudar a resolver. Si bien son mesas distintas, tienen algunos problemas trasversales de servicios que, al entenderlos mejor, se pueden ayudar y muchas veces no son leyes ni grandes cambios, sino simplemente ajustes normativos que los puede ayudar bastante.

¿Cómo ve la recientemente creada mesa textil?
Ya hay una matriz inicial de problemas asociados con falta de innovación, potencialmente competencia desleal, potencialmente temas de falta de capital humano, son cosas que están identificadas. Es una mesa que recién está trabajando, y no tiene el nivel de avance de las otras, pero yo veo con optimismo que podemos ayudar a un sector. Es una mesa linda, un sector lindo donde tal vez ha habido un poco de abandono del Estado.

Además de las cuatro mesas que ya están instaladas, ¿se podría abrir alguna más?
Hay bastante por hacer en la mesa textil y, bueno, creo que es la última gran mesa que vamos a crear. Faltando menos de un año de gestión creo que tenemos que consolidar lo hecho en lugar de hacer muchas nuevas cosas.

¿La clave para el éxito de las mesas es la interacción entre sector público y privado?
Si el sector privado quiere venir es porque es suficientemente importante lo que le podemos dar. Yo diría que nos quedaríamos con estas cuatro grandes mesas en esta gestión, pero es un esfuerzo que debería continuarse porque sí hemos encontrado que es un mecanismo muy útil de combinar diagnóstico con ejecución.

¿Qué puede rescatar de esa experiencia?
En el Perú, mucha gente dice sobran diagnósticos, yo lo que diría es que sobran malos diagnósticos, el Perú está como medio mal diagnosticado. Buenos diagnósticos no ejecutados son pocos, pero sí corres el riesgo de hacer diagnósticos que nunca se implementan y se quedan en un PDF.

¿El Instituto Nacional de la Calidad ya está en funcionamiento?
Está creado desde el año pasado. El sistema nacional de calidad, la política nacional de calidad; todo entró a operar administrativamente el primero de abril y a operar a plenitud el primero de junio. Ya está operando a mediados de julio perfectamente, al 100%.

¿Cuándo comenzará a exhibir logros?
Los resultados se están viendo desde ahora. Tenemos los objetivos de aumentar de manera sustancial el número de laboratorios acreditados; ya estamos en el proceso de construir laboratorios de meteorología, trabajando en temas de normas, etc. Estamos con tasas de crecimiento en laboratorios, por ejemplo, en los últimos tres años de 250%. El Inacal es ese tipo de instituciones transversales que ayudan en muchísimas cosas.

Otro tema clave es el de los CITE. Hoy hay 12, pero prevén tener 47 a finales del gobierno. ¿Cómo ha sido el avance?
Ahorita estamos esperando crear 25 CITE públicos y 10 privados. Ya salió el decreto que le da marco al ITP para firmar convenios de desempeño con los CITE privados. Ya tenemos los recursos para hacer los 25 y estamos en proceso de convocatoria de obras. Además estamos trabajando para crear la red de CITE.

¿Cuándo terminaría la primera obra?
Ya estamos convocando obras y los primeros CITE inaugurados ya estarían en noviembre y así vamos a tener un continuo. No vamos a esperar a que exista el CITE para nombrar a los consejos directivos, para que vayan trabajando con los clústeres para que, cuando la infraestructura esté lista, el trabajo ya esté avanzado.

La ley de Factoring ya está completa, pero ha recibido críticas como decir que “es muy apresurada”. ¿Qué opina?
La ley de factoring se viene trabajando desde setiembre del año pasado, la cual presentamos al Congreso en diciembre y se aprobó en febrero. Sin embargo, en la medida que hubo dos puntitos de la ley que eran perfectibles, hicimos el decreto legislativo y pedimos facultados para hacer estos ajustes de factoring.

Las empresas, sin embargo, también consideran que los plazos para cambiar los talonarios son algo ajustados…
En realidad, la obligación de tener tercera copia existe desde enero del 2014. Lo que estamos haciendo es simplemente ponerle más dientes a una ley de hace tiempo. El costo de la factura es relativamente pequeño. Inicialmente la norma había sido hecha para que todos cambien talonarios el 30 de setiembre, pero ahora estamos dando dos etapas: hasta el 31 de octubre y hasta el 31 de diciembre.

¿Cómo incentivar que las grandes empresas (usualmente reacias al descuento de facturas) decidan facilitar ello?
Los estás obligando, es una obligación. Después de ocho días va a haber anotación en cuenta y la tercera copia de la factura va a ser un título de valor. No va a haber incertidumbre. Lo que deberías esperar es que, después de esos ocho días ,el precio de la factura suba porque va a quedar claro quién es el que la va a pagar. Eso va a reducir la tasa de interés.

Todo queda claro y el banco o empresa sabe quién tiene que pagar la factura, lo que va a reducir la tasa de interés implícita de todas maneras.

¿Entonces, en principio, no habría por qué no esperar que el mercado despegue?
Siempre hay reticencia al cambio, pero la única forma de hacer que esto funcione como en otros países es seguir dándole. Hemos hablado con la mayoría de agentes económicos y hay un convencimiento de que el sistema normativo está bastante bien diseñado y lo que sigue es hacer seguimiento, porque el potencial es S/. 6,000 millones de transacciones en poco tiempo.

Ley acuícola estará implementada antes de fin de año
Las mesas de los sectores acuícola y forestal ya están prácticamente graduadas. Sobre el primer rubro el ministro de la Producción, Piero Ghezzi, indicó que la nueva ley sale en cuestión de días y estará reglamentada e implementada “definitivamente” antes de fin de año.

“Estaría definitivamente antes de fin de año, no tenemos tiempo para esperar eso. Nosotros pensamos por semanas”, afirmó.

La nueva ley no taería incentivos tributarios, pero Ghezzi precisó que una parte tributaria tendría que presentarse como proyecto de ley y pasar por el Congreso.

Además, resaltó la importancia del Sanipes -que viene a ser una suerte de Senasa para el sector- que “puede ser un organismo estrella del sector público”.

En cuanto al sector forestal, resaltó que su reglamento podría salir esta semana, pero que ha sido un trabajo arduo porque tiene 600 artículos.

La otra arista clave para el despegue del sector -dijo- es conseguir financiamiento a tasas razonables para estas actividades.

“Las coordinaciones con el MEF están bastante avanzadas. En el marco de facultades delegadas tenemos que encontrar el mecanismo para canalizar los recursos”, comentó.

Soluciones
El Factoring está diseñado para atacar un problema en que las mipyme están financiando a las empresas grandes, pero no a la tasa de empresa grande sino a tasa de mipyme. Al generar la factura negociable la tasa converge al costo que corresponde al agente que realmente debe el dinero.