Los embarques de café peruano en el período enero-agosto del 2015 sumaron 66,700 toneladas, equivalentes a 1.45 millones de quintales, cifras históricamente menores a los volúmenes que en similar período de meses se registran desde hace 19 años, pues en 1996 llegaron a 71,300 toneladas, que corresponde a 1.55 millones de quintales, informó la JNC.
Esta fuerte caída se debe a la contracción del mercado internacional y bajos precios que se pagan a los productores, que en los últimos cuatro meses oscilan entre S/. 5 y S/. 7 el kilo de café pergamino, contra un costo de S/. 9.
“Confiamos que en los próximos meses se dinamice el mercado y logremos sumar ventas de unos 2.3 millones de quintales, y de alguna forma disminuir los stock de café almacenados en cooperativas y empresas exportadoras”, expresó el presidente de la JNC, Tomás Córdova.
Dijo que según registro de la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat) el valor de los embarques en los primeros ocho meses del 2015 asciende a US$ 228 millones, mientras el 2014 se registraban US$ 320 millones.
Estimó que hasta diciembre se podrían alcanzar US$ 580 millones por un volumen de 3.8 millones de quintales, con un precio promedio de US$ 153, aunque en la Bolsa de Nueva York se viene cotizando estos días por debajo de US$ 125.
Asimismo, expresó que en el mercado de cafés especiales, especialmente orgánico y de comercio justo, algunos importadores se resisten a pagar precios diferenciados, según los estándares y normas establecidas, afectando el cronograma de ventas de los productores y organizaciones cooperativas.
“Estamos obligados a replantear nuestras estrategias de venta, lo cual incrementa los costos operativos, y nos hace menos competitivos en los mercados de especialidad. Requerimos que las autoridades abandonen su indiferencia frente a la crisis del café, y con realismo, escuchen y trabajen con las instituciones cafetaleras que integran el Consejo Nacional del Café”, dijo.
Áreas
Córdova indicó que por lo menos 30,000 hectáreas de café ubicadas por debajo de 1,200 metros sobre el nivel del mar, han sido reemplazadas por cultivos de piña, cacao, cítricos y kion, en vista de los altos costos y la baja rentabilidad del grano aromático.
Estos cambios se vienen dando en San Martín, Selva Central y La Convención, principalmente, agregó.
Refirió que el Gobierno, en especial el ministro de Agricultura y Riego, Juan José Benites, está dejando una bomba de tiempo al que le sigue, en la medida que miles de productores no podrán honrar los créditos contraídos, ni tendrán ingresos para sostener a sus familias.
“Las autoridades del Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri) han optado por ignorar la contribución y experiencia de las cooperativas y las empresas exportadoras, que han trabajado en productividad, calidad y articulación con el mercado. Esta actitud está ocasionando grave daño a la caficultura peruana”, señaló.