Washington (Reuters).- El déficit comercial de Estados Unidos aumentó levemente más de lo esperado en julio debido a una caída de las exportaciones, pero un repunte en las importaciones apuntó a cierta firmeza en la demanda subyacente a comienzos del tercer trimestre.
El Departamento de Comercio dijo que el déficit comercial subió un 13.3%, a 39,100 millones de dólares. El saldo negativo del balance comercial de junio fue revisado a 34,500 millones de dólares desde una cifra informada previamente de 34,200 millones de dólares.
Economistas consultados por Reuters pronosticaban que el déficit comercial subiría a 38,700 millones de dólares en julio. Ajustado por inflación, el déficit comercial aumentó a 47,700 millones de dólares desde 43,800 millones de dólares en junio. Esta medida entra en el cálculo del Producto Interno Bruto (PIB).
La contribución del comercio en el crecimiento del PIB en el segundo trimestre fue neutral, pero los economistas esperaban que aportara a la expansión este trimestre, y el alza en el llamado déficit comercial real probablemente no es suficiente como para cambiar esa opinión.
La economía creció a una tasa anual de un 2.5% en el trimestre abril-junio, más que el ritmo de expansión de un 1.1% del primer trimestre.
El promedio móvil de tres meses del déficit comercial, que elimina la volatilidad mensual, declinó a 39,100 millones de dólares en los tres meses hasta julio desde 39,300 millones de dólares en el trimestre previo.
El alza de las importaciones en julio, que reflejó aumentos en suministros industriales, automóviles y bienes de consumo, sugiere algún fortalecimiento en la demanda doméstica.
Las importaciones de bienes y servicios se elevaron un 1.6%, a 228,600 millones de dólares. Las importaciones de autos, partes y motores fueron las mayores jamás registradas en julio.
Las exportaciones de bienes y servicios bajaron un 0.6%, a 189,400 millones de dólares en julio. Sin embargo, las exportaciones de petróleo alcanzaron un máximo histórico.
Una débil demanda desde el exterior, especialmente en Europa, ha provocado una baja en el crecimiento de las exportaciones después de que el comercio ayudó a sacar a la economía estadounidense de la recesión del 2007-2009.
En julio, las exportaciones de la Unión Europea, integrada por 27 países, cayeron un 7.4%, lo que resultó en un déficit comercial histórico. Los envíos a la Unión Europea en los primeros siete meses del año declinaron un 4.4% en comparación al mismo período del 2012.
Las exportaciones a China cedieron un 4.9%. China ha sido uno de los mercados de más rápido crecimiento para los bienes estadounidenses, pero el crecimiento allí se ha desacelerado en los últimos meses y las exportaciones al país subieron sólo un 4.0% en los primeros siete meses del 2013.
Las importaciones desde China saltaron un 8.3% en julio, lo que elevó el polémico déficit comercial de Estados Unidos con China a un récord de 30,100 millones de dólares.