Madrid (Reuters).- El Gobierno español reveló el viernes que su economía se contraería en el 2013 más de lo que se esperaba inicialmente y que su déficit presupuestario sería más alto de lo que se había comprometido, pero la Unión Europea le dio más tiempo para que lleve la brecha a los límites del bloque.
Las autoridades esbozaron el viernes un plan de reforma para devolver a España a la senda del crecimiento, pero los detalles fueron pocos.
El Gobierno aseguró que no había necesidad de aprobar nuevas medidas estructurales importantes, aumentos de impuestos y recortes de gastos para cumplir con los nuevos objetivos.
La economía se contraería un 1.3% desde una previsión anterior de una caída de un 0.5% y regresaría a la senda del crecimiento en el 2014.
Para este año, el déficit público previsto ahora es de un 6.3% del PIB frente al 4.5% calculado antes. Esto significa que, con un déficit del 7.1% del PIB en el 2012, excluyendo los fondos inyectados a los bancos del país, el gobierno español necesitará disponer de menos de 10,000 millones de euros para llenar la brecha en el 2013.
Es probable que se le permita al gobierno disponer de dos años adicionales, hasta el 2016, para llevar el déficit por debajo del limite europeo del 3% del Producto Interno Bruto.
La Comisión Europea indicó que tendría sentido darle más tiempo a Madrid para reducir la brecha presupuestaria, aunque no se tomarán decisiones formales sino hasta el 29 de mayo, además de que los ministros de Finanzas de la UE tendrán que firmar el compromiso.
El déficit del 2014 se situaría en un 5.5%, frente al objetivo inicial de un 2.8%. El Fondo Monetario Internacional recibió de buen grado las decisiones anunciadas por el Gobierno de España en su camino hacia una relajación del clima de austeridad, diciendo que las medidas deberían ayudar al empleo y a devolver la salud fiscal al país.
Funcionarios europeos habían dicho a Reuters esta semana que la aplicación de las reformas, no el tamaño del programa, sería la clave para obtener la bendición de la Unión Europea a la nueva estrategia.
La vicepresidenta y portavoz del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría insistió que las nuevas previsiones eran conservadoras y podrían beneficiarse de una nueva caída en los costos de endeudamiento del país, así como de una recuperación gradual de la economía de la zona euro.