Los empresarios industriales – relacionados a la elaboración de alimentos procesados – están dispuestos a financiar un estudio que recoja el perfil nutricional de los peruanos como insumo para la elaboración de políticas públicas e incluso este material podría ser utilizado en la implementación del reglamento de la Ley Alimentación Saludable emitido hace un mes.
Así, lo explicó a Gestión.pe el director y presidente del Comité de Alimentos y Bebidas de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), Alejandro Daly.
La Ley de Alimentación Saludable establece los parámetros a seguir para las advertencias publicitarias – alto en sodio, azúcar y grasas saturadas – que deberán ser consignadas en las etiquetas de los alimentos procesados y cuyo manual está en pleno proceso de elaboración.
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“Nosotros no nos hemos quedado en la crítica, también hemos hecho hasta seis propuestas antes de la reglamentación de la ley de Alimentación Saludable. La industria ha planteado la necesidad de que tengamos un perfil nutricional que sirva no solamente para temas regulatorios sino en general en políticas públicas de alimentación, nutrición y salud”, remarcó el ejecutivo.
¿Están dispuestos a financiarlo? “Le hemos dicho al gobierno que estamos en la mejor disposición de contribuir al financiamiento de este estudio y la respuesta del gobierno hasta el momento es de silencio y, reiteramos, que estamos en la mejor disponibilidad (de financiar un estudio)”, apuntó.
En esa línea, el director del Instituto Universitario de Innovación Alimentaria de la Universidad Católica de Murcia (UCAM), Javier Morán, consideró que para tomar decisiones en nutrición y salud pública, es fundamental contar con un estudio sobre los hábitos de consumo de los peruanos.
“En Perú no existen datos (sobre nutrición y salud) cuando en otros países esta es una práctica habitual, en México – por ejemplo – se hacen encuestas de nutrición y salud cada cuatro años, por lo que se pueden comparar datos, observar las tendencias y evoluciones, cosa que en Perú no hay”, explicó el especialista.
Morán precisó que este estudio debería recoger el consumo diario de los peruanos dividido por género, edades, estratos sociales, regiones, dado que la alimentación entre distintos grupos es distinta entre sí. “Si queremos tener una radiografía clara sobre qué es lo que come el peruano medio, se debería llevar a cabo una encuesta de hábitos dietéticos”, refirió.
Informalidad
Daly consideró, asimismo, que la Ley de Alimentación Saludable aumentará el consumo de aquellos alimentos procesados que son elaborados sin supervisión de ninguna autoridad ni mucho menos con registro sanitario.
Para la SNI, la informalidad en la industria de alimentos aumentaría hasta en 50%. “Basta caminar por el centro de Lima para ver la cantidad de productos envasados, sin ningún sello ni vigilancia sanitaria. Estamos hablando de (que crecería) entre 40% a 50%”, indicó.
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Igualmente, dijo que la ley afectaría la generación de empleo formal y de cadenas de valor.
“La cifra que tenemos de empleo formal en la industria de alimentos es de 500,000 puestos de trabajo. A la par, se pone en riesgo las cadenas de valor como de agricultura, de envases y de equipos, entre otros. En concreto, el efecto que puede tener esta mala legislación sobre la generación de empleo formal y del desarrollo de cadenas productivas va ser negativo”, puntualizó.
Ante esta posición, la SNI subrayó que “no se ha agotado el diálogo” con representantes del Ejecutivo para darles a conocer sus observaciones sobre la Ley de Alimentación Saludable, por lo que mientras no se terminé este diálogo “no se tomarán acciones diferentes”, a raíz de la intención de los industriales de presentar una denuncia ante la Comunidad Andina (CAN).
Pese a este diálogo, Daly mostró su malestar dado que la titular del Ministerio de Salud (Minsa) – ente encargado de la elaboración del Manual de Advertencias Publicitarias y de la implementación de la Ley de Alimentación Saludable – “jamás ha atendido un solo pedido de la industria para darle a conocer nuestros puntos de vista”.
“Somos respetuosos de las decisiones de los gobiernos, pero este gobierno entro al poder diciendo que iba establecer un dialogo con los sectores productivos. Sin embargo, la ministra de Salud no ha atendido ni un solo pedido de la SNI”, puntualizó.
