Washington (Reuters).- El número de estadounidenses que presentaron nuevas solicitudes de subsidios por desempleo cayó más de lo esperado la semana pasada, lo que apunta a la resistencia del mercado laboral pese al recorte de gastos por parte de Washington.
El informe de solicitudes mostró que el número de personas que aún reciben beneficios bajo programas regulares estatales tras una semana inicial de ayuda cayó en 112,000, a 2.91 millones, en la semana que terminó el 11 de mayo.
Fue la primera vez en cinco años que las llamadas solicitudes continuas fueron menores a la marca de 3 millones.
Los pedidos iniciales de beneficios por desempleo cayeron en 23,000 a una cifra desestacionalizada de 340,000, dijo el Departamento del Trabajo, lo que llevó al dato por debajo de la marca de 350,000 que los economistas usualmente asocian con un mercado laboral en consolidación.
La caída de la semana pasada deshizo la mayor parte del alza de la semana previa, lo que sugiere que los empleadores no están despidiendo a trabajadores en respuesta a una política fiscal más ajustada, especialmente los recortes de gastos gubernamentales por US$ 85,000 millones que han apagado la actividad fabril.
El dato de la semana anterior cubrió el período del sondeo para las nóminas no agrícolas de mayo. Los pedidos de subsidios por desempleo cayeron en 15,000 entre los períodos de los sondeos de abril y mayo, lo que sugiere un alza estable en el empleo este mes.
El mercado laboral está siendo vigilado de cerca por la Reserva Federal en la medida en que se calienta el debate sobre el futuro de sus estímulos monetarios expansivos.
Aparentemente, la actividad económica estadounidense se ha enfriado un poco en el segundo trimestre debido a la política fiscal más ajustada, pero la desaceleración podría ser temporal en la medida en que una constante alza del empleo se combine con un incremento en el precio de las acciones y de las casas para respaldar el gasto del consumidor.