Washington (Reuters).- El número de estadounidenses que presentaron nuevas solicitudes de subsidios por desempleo cayó más a lo esperado la semana pasada, a su menor nivel en cuatro meses, en una posible señal de que las contrataciones podrían estar acelerándose en julio.
Los pedidos iniciales de beneficios estatales por desempleo cayeron en 24,000, a una cifra desestacionalizada de 334,000, dijo el Departamento del Trabajo.
Economistas consultados por Reuters pronosticaban que las solicitudes caerían a 345,000 la semana pasada. El dato de la semana previa fue revisado para mostrar 2,000 pedidos menos a lo informado originalmente.
Las lecturas de solicitudes de subsidio por desempleo pueden ser volátiles en julio debido a que muchas fábricas cierran para reequiparse durante el período y es difícil para el Gobierno ajustar el dato por oscilaciones estacionales debido a que el calendario de cierres varía de un año a otro.
Aún así, el promedio de cuatro semanas para nuevas solicitudes, que elimina la volatilidad, cayó en 5,250 en comparación a la semana previa.
El dato refuerza la opinión de que el mercado laboral está soportando bien las alzas de impuestos y recortes presupuestarios federales de este año, que parecieron arrastrar fuertemente al crecimiento económico en la primera mitad del año.
De hecho, el dato de solicitudes del jueves fue recogido durante la misma semana en que el Departamento del Trabajo encuesta a empleadores para estimar cuántos puestos de trabajo agregó la economía durante el mes completo.
En comparación a la misma semana de junio, el promedio de cuatro semanas fue un 0.7% menor la semana pasada.
El mercado laboral estadounidense ha mostrado señales de fortaleza en las últimas semanas. En junio, los empleadores del país crearon 195,000 puestos de trabajo.
Eso ha alimentado las expectativas de que la Reserva Federal comience a reducir su enorme programa de estímulo económico tan temprano como en septiembre.
Al mismo tiempo, el presidente de la FED, Ben Bernanke, dijo esta semana que la FED sólo comenzará a retirar su apoyo si la economía mejora de acuerdo a lo esperado por los consejeros del banco central.
El informe de solicitudes mostró que el número de personas que aún recibe beneficios en virtud de programas estatales regulares después de una semana inicial de ayuda subió en 91,000, a 3.1 millones, en la semana que terminó el 6 de julio.