AP.- En esta temporada de fin de año, los estadounidenses podrían abstenerse de gastar si no encuentran mayores ofertas. Así lo creen las cadenas gigantes como Wal-Mart y Kohl’s, pese a la mejora de la economía.
Las grandes minoristas conocen muy bien este problema. Desde el inicio de la recesión a finales de 2007, las tiendas han tenido que ofrecer a los estadounidenses que enfrentan limitaciones financieras mayores descuentos que nunca para que vayan a las tiendas.
Sin embargo, esos descuentos merman las ganancias. A la fecha, Wal-Mart, Target y Kohl’s figuran entre más de dos decenas de cadenas importantes que redujeron las proyecciones de sus ganancias para el trimestre o el año.
Una gran razón es la expectativa de que tendrán que ofrecer grandes rebajas para invitar a gastar a los clientes. Ya hay indicios de que los minoristas ofrecerán grandes descuentos.
Se ponen las pilas
Wal-Mart, por ejemplo, comenzó el viernes a igualar o mejorar los precios que ciertos competidores como Best Buy han anunciado para algunos juguetes y aparatos electrónicos para la jornada de rebajas posterior al Día de Acción de Gracias, conocida como Viernes Negro.
Best Buy también tiene planes para igualar los precios de la competencia, incluso después de que los consumidores hicieran compras.
Target, famosa por su caprichosa publicidad, anuncia sus precios en mensajes televisivos de fin de año por primera vez en al menos una década.
Las expectativas relativizadas, descuentos adelantados y proyecciones de menores ganancias de los minoristas tienen lugar pese a los indicios de una recuperación de la economía.