(EFE).- La economía de Estados Unidos creció a un ritmo anual del 5% en el tercer trimestre del año, el mayor desde mediados de 2003, gracias a la fortaleza del gasto de los consumidores y de la inversión empresarial, según informó hoy el Departamento de Comercio.
Así, la expansión de la economía estadounidense entre julio y septiembre fue la mayor registrada en un trimestre en once años.
El tercer y último cálculo del Gobierno sobre la evolución del producto interior bruto (PIB) entre julio y septiembre superó las expectativas de los analistas, que habían pronosticado un crecimiento en torno al 4%, y las estimaciones previas de un incremento del 3.5% revisado después al 3.9%.
La revisión al alza de la expansión del PIB en el tercer trimestre se debió, fundamentalmente, al gasto de los consumidores, que creció un 3.2% frente al 2.2% estimado inicialmente.
El gasto de los consumidores equivale a más de dos tercios de la actividad económica del país y hoy el Departamento de Comercio también informó, por otro lado, de que ese indicador subió un 0.6% en noviembre, con lo que registró su mayor crecimiento en tres meses.
Los consumidores están gastando más debido, en parte, a los bajos precios de la gasolina, en mínimos desde 2010 gracias al “boom” energético en EE.UU. y a la caída global del costo del petróleo.
Otro de los componentes más decisivos en la evolución del PIB, la inversión empresarial, también tuvo un buen desempeño entre julio y septiembre, con un incremento del 7.7% frente al 5.1% calculado previamente.
El dato del crecimiento del PIB en el tercer trimestre llevó al Dow Jones de Industriales, el principal indicador de Wall Street, a superar por primera vez los 18,000 puntos poco después de la apertura.
El principal asesor económico de la Casa Blanca, Jason Furman, destacó en un comunicado que el “fuerte crecimiento” del PIB entre julio y septiembre es “congruente” con otros indicadores que están mostrando una mejoría en el mercado laboral y en la producción energética nacional.
Furman recordó, además, que 2014 ha sido el año “más fuerte” en cuanto al crecimiento del empleo desde la década de los noventa.
De hecho, este año la media mensual de creación de empleo de la primera economía del mundo se ha situado en 241,000, un nivel que no se alcanzaba desde 1999, lo que confirma la recuperación del mercado laboral tras la crisis de 2008.
En noviembre, el índice de desempleo se mantuvo en un 5.8%, sin cambios con respecto a octubre, y la economía generó 321,000 empleos, la mejor cifra en casi tres años.
Asimismo, en el segundo trimestre la economía creció a un ritmo anual del 4.6%, lo que compensó la contracción del 2,1 % registrada entre enero y marzo a causa de un invierno que fue particularmente frío y con varias tormentas de nieve que paralizaron las actividades en buena parte del país.
Los economistas prevén que el crecimiento se desacelerará en el último trimestre del año hasta un ritmo anual en torno al 2.5% y para 2015 se mantendrá alrededor del 3%.
Mientras, la primera subida de los tipos de interés de referencia, que están entre el 0% y el 0.25% desde diciembre de 2008, se espera para mediados de 2015.
La Reserva Federal (Fed) concluyó la semana pasada su última reunión del año sin poner fecha a esa esperada subida de tipos, aunque su presidenta, Yanet Yellen, dijo que es “improbable” que vaya a producirse al menos hasta abril.
Al término de su reunión de dos días para analizar la política monetaria del país, el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por su sigla en inglés) del banco central indicó en un comunicado que será “paciente” a la hora de determinar cuándo es momento de elevar los tipos.
A continuación, Yellen hizo hincapié en una conferencia de prensa en que será la evolución del crecimiento económico y de la inflación lo que dictará cuándo debe producirse la subida de tipos.