Pekín (Reuters).- La economía de China seguirá enfrentando en el 2016 una presión a la baja relativamente intensa que podría ralentizar aún más la tasa de crecimiento, dijo la Comisión Nacional de Desarrollo y Reformas, e instó a las autoridades a relajar más la política monetaria, reportó el domingo el diario Economic Daily.
La NDRC, por sus siglas en inglés, dijo que el Gobierno chino debería seguir recortando sus tasas de interés y el encaje bancario para impulsar la débil expansión de la segunda mayor economía del mundo.
China también debería permitir una mayor depreciación del yuan, indicó la comisión, a fin de apuntalar las exportaciones.
Pekín ha tenido serias dificultades para alcanzar su meta de expansión económica de alrededor de 7% para este año, pese a la serie de medidas de alivio monetario tomadas en los últimos meses.
Los líderes de China ya han iniciado su reunión anual para definir los planes económicos y de reformas en 2016, informaron el viernes medios oficiales. El banco central también ha llamado la atención por no responder al ciclo de alza de tasas de interés que empezó la Reserva Federal estadounidense esta semana.
La comisión de expertos estimó que el crecimiento de la inversión podría caer a cerca de 9% en 2016 y que el gasto en bienes raíces permanecería plano, según el reporte.
El aumento del consumo podría ser nuevamente menor al 10% el año próximo, mientras que las exportaciones podrían crecer ligeramente.